El Lobo Killua y El Campesino Gon

Capítulo 5 *¿Celos o Enemigo?*

—¿Te gusta el morrón rojo?

Killua mantuvo su rostro normal pareciendo indiferente ante la pregunta, pero en sus adentros mostraba un rostro lleno de repugnancia. —¿Por qué la pregunta?

—Curiosidad~  le dijo Gon con un ronroneo —A mí me gustan, pero eso no quiere decir que sean mis favoritas, entonces...

—¿Entonces...?— repitió Killua sin mucho afán.

—¿Te gustan?

Killua suspiro. Era injusto que él preguntara algo y Gon no le haya respondido. Pero ahora se podía vengar aunque sea un poco.

Killua se burlo. —Tal vez si, tal vez no.

—¡Eh!, pero— Gon se detuvo. Entre cerró los ojos y arqueo una ceja en dirección a Killua, dando paso a una mirada de obviedad en lo que trataba de hacer. —Te estás vengando...

Aquí comenzaba de nuevo. Una gran satisfacción se elevo en Killua y el cosquilleo en todo su cuerpo se lo decía. Saber que Gon comprendía lo satisfizo; Gon fue directo en decirlo y eso podía ser una desventaja para Killua, pero a la vez podía ser la perdición de Gon tarde o temprano.

Killua sonrió ampliamente y fijo su vista en el pueblo que se encontraba a unos metros frente a ellos. Mito estaba detrás de Killua y Gon, observando la animada conversación de ambos. Después de todo, Mito ya sabía que serian una bonita pareja.

—No lo sé— respondió Killua —¿Tu qué crees?, ca-ne-li-ta~

—¡D-Deja de decirme así!— grito Gon y Killua sonrió victorioso.

Ver como el rostro de Gon ardía se sentía orgulloso. Sus ojos color marrón, abiertos con su ceño fruncido en dirección a él, dedicándole solo su vista ha él, se sentía maravillado que cualquier otro alfa.

—Ya mero llegamos— anuncio Mito.

Ambos voltearon a ver la entrada del Pueblo. Isla Ballena era sorprendente al verlo; casas no tan grandes pero acogedoras, su camino de mosaicos de piedra encajando a la perfección, pero sobre todo lo que ha Gon le encantaba de ese lugar. Los habitantes de ese insignificante y agradable Pueblo lleno de energía.

Killua observa cada detalle del lugar, las casas, los arboles, el suelo, sobre todo a Gon. Ver sus reacciones de emoción y felicidad lo habían hechizado. Sus expresiones eran brillantes para él, su amplia sonrisa, sus ojos con más color, su rostro llena de vida.

—Veo que te gusta este lugar— dice Killua, cruzando sus brazos hacia su pecho. Era obvio pensar eso, al verlo demostraba mas de la cuenta con tan solo observarlo.

Gon sonríe mas dejando al descubierto sus dientes blancos y se ríe. No puede evitarlo, ¡Ese lugar le encanta, le fascina, le gusta demasiado y es algo que no cambiaría nunca!

—¡Si!— contesto Gon, y voltea a ver ha Killua con la misma expresión, incluso cuando Killua lo está mirando como si le hubiera dicho una gran sorpresa. —¡Me gusta!

Los ojos de Killua se abrieron y una diminuta sonrisa formaron sus labios. Gon era brillante, si lo es.

—Que les parece si ustedes van por dulces mientras yo compro lo necesario— dijo Mito, acercándose a ellos para darles dinero suficiente. —De acuerdo.

—Si— dijeron ambos.

—Vamos Killua.

Gon agarro el brazo de Killua y comenzó arrastrarlo hacia el Pueblo de Isla Ballena, con el fin de llegar rápido. Killua por su parte solo se dejo llevar por Gon, sentir su mano sobre su piel le dio escalofríos, pero rápidamente cambio eso por una sensación extraña para él. Aun así no aparto su brazo de Gon y ahora simplemente se encuentra siguiéndolo. Como un gran Lobo Guardián...