capítulo IV

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Cuando desperté lo primero que hice fue ver la hora en mi móvil, eran las 9:00 am, ya había descansado lo suficiente, me senté a la orilla de la cama, pensé en lo raro que había sido el sueño de la noche anterior, por ahora no recuerdo mi rostro cuando era pequeña, ni a mi padre, pero de lo que si estoy segura es que a la mujer que había aparecido en ese sueño no era mi madre, pero, ya qué... Ni si quiera estoy segura si ese sueño fue real, de pronto alguien tocó a mí puerta.

Toc toc toc- <<¡Rayos quiero estar sola, ni si quiera me he quitado la pijama!>>

-Pase- gruñí, cuando entró pude notar que se trataba de Alsan, mi mejor amiga, por suerte si recordaba quién era ella.

-Hola cariño, ¿Cómo te encuentras?- dijo sonrientemente, me abrazó.

-Pensé que nunca aparecerías- correspondí a sus gestos.

-¿Se puede?- se trataba de Mallark, ¿En serio este tipo era mi novio?, Me parece tedioso.

-¿Qué diablos haces aquí Mallark?- Alsan parecía un poco molesta.

-Pensé que nunca te volvería a ver, Alsan- Mallark era tan arrogante, no entiendo cómo puede gustarme.

-Pues le daría gracias al cielo no tener que volver a verte, engendro del demonio- los ojos de Alsan eran de un verde serpiente, pero se habían tornado negros.

-¿No sería mejor qué, le dieras gracias al infierno querida?, ¿A caso sólo yo, soy el engendro del demonio?- levanto las cejas.

-Te aseguro que Daren no querría verte aquí, Mallark- había dicho Daren, entonces ella si existía.

-¿De qué coños están hablando?- les interrumpí.

-No te preocupes, no es nada Allison- contestó Alsan.

-Creo que alguien aquí, no es lo suficientemente, “ buena amiga”, ¿Verdad, Alsan?- la interrumpió Mallark.

-¡Tú nunca has sido suficientemente hombre!, ¡Maldito mentiroso!- Alsan de verdad se había enfadado, llegó al punto de gritarle a Mallark.

-Mallark sal de mi habitación- ordené.

-Per- no deje que terminara la frase.

-¡Sal!, Joder, ¿qué no entiendes?- me exalte, y grité.

Mallark salió de la habitación.

-No te resistirás a mis labias y a mí bonita- cerro de un portazo.

-¿Me puedes explicar, qué está sucediendo Alsan?- estaba algo molesta

-Nada cariño nada, solamente que Mallark es un odioso- me sonrió.

-Per- no me dejo terminar el pequeño fragmento Alsan.

-¿Sabes qué?, Mejor vete a dar una ducha, desayunaremos y nos marchanos juntas de compras para que mañana regreses a clases- se paró y abrió la puerta de mi baño- ¿Cuánto tiempo tienes que tener el yeso?

-Esta bien, un mes aproximadamente- bufé.

-¡Qué suerte!, Ahora dúchate y te espero allá abajo, iré a preparar el desayuno.

-¿Y mamá?- pregunté.

-Esta de turno de enfermera, no te preocupes.

(...)

Ya había terminado de ducharme, me vestí, opte por shorts ya que no podría utilizar pantalón gracias a mi pierna fracturada, una blusa manga larga blanca y un tenis, si un tenis, no podía utilizar los dos.

Bajé las escaleras lo más despacio posible, no quería quebrarme la otra pierna, cuando baje a la cocina Alsan ya había preparado el desayuno, se trataba de granola con yogurt, uno de mis desayunos preferidos, terminamos el desayuno y Alsan se dirigió a calentar el coche, en lo que yo llegaba pude observar un camión de mudanzas, de él bajo un chico alto, usaba gafas, vestía de blanco y negro.

-¡Alli, apúrate!- bocinó y gritó, Alsan desde el coche, me apresure y me senté en el asiento delantero, me costaba trabajo dominar las muletas.

-Te ha dejado boba el nuevo del vecindario, ¿Verdad?- lo dijo en tono de burla.

-No, no, no, claro que no, simplemente que esa casa a estado deshabitada hace mucho tiempo, y es raro que alguien la rente.

(..)

Terminamos las compras y llegamos a casa, me encontraba exhausta, no es fácil caminar con muletas, Alsan abrió la puerta y mi sorpresa era que mi madre estaba preparando la cena.

-Hola- dije entrando a mi “hogar”.

-Cariño, ¿Te encuentras mejor?- su voz era dulce.

-Si, si, sólo que estoy cansada, subiré con Alsan a dejar las compras a mí habitación y cenaré allá- creo que no le molestó la idea.

Subimos a mi habitación y dejamos las compras realizadas en mi cama, tenía dudas, demasiadas dudas, talvez Alsan podría ponerle fin a este enigma.

-¿En verdad Mallark es mi novio?- pregunté.

-¡Qué!, Pfff, claro que no, él sólo es un engreído fastidioso que ha tratado de ganarse tu corazón, tú lo odias querida, no se qué tanto te habrá metido en la cabeza ese hombre- gracias al cielo no tenía que ver nada con ese patán.

-¿Podré volver mañana a la escuela?, ¿Qué hay de nuevo?- me sentía aliviada de alguna manera de saber que no era novia de ese mediocre, pero bese a ese mediocre.

-Si, claro, mañana pasó por tí a las 8:00 am, tines que estar preparada y verte muy mona el primer día de clases.

(...)

Se llegó la noche y volví a caer en un profundo sueño, me volvía a encontrar con el chico de la máscara, está vez no tuve miedo y me acerqué a él.

-¿Qué me depara está noche?- hablé amablemente.

-Lo que tú decidas pequeña- su voz era tan dulce.

-¿Puedes respóndeme algunas preguntas?

-Claro, pero tienes que abrazarme y verlo por tí misma.

-¿La niña de ayer era yo?

-Sólo abrázame pequeña.

Lo abrace y ahora me encontraba en mi casa, Daren me tenía entre sus brazos, a su lado estaba mi madre, esperen, era mí madre.

-Sofía, ella es Allison, mi hija- habló Daren.

-Ohhh, que pequeña tan hermosa, se parece tanto a tí- me tomo entre sus brazos.

-Tengo miedo, yo no las conozco a ustedes, ¡Dejénme ir!, ¡Dejénme ir!- la pequeña Allison gritaba, ella no quería estar ahí.

-Shhhh, tranquila cariño, todo estará bien, soy tu madre y cuidaré todos los días de tí.

Daren logró convencer a Allison que ella era buena persona, Allison se quedó dormida en el sofá escuchando los cuentos de su madre, después de todo Daren no se veía tan malvada.

-Ok, mira Sofía, desde hoy tú cuidarás de ella, yo tengo cosas que hacer en el inframundo, cuídala mucho- ella hablaba con mi madre

-Apúrate a realizar el hechizo de que le hagas pensar que yo soy su madre, antes de que despierte.

Daren se acercó a Allison, le dió un beso en la mejilla y susurro un conjuro en su oído, de pronto la maldita alarma me despertó, maldito ruido.

Sólo espero que esto sea un sueño nada más.

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¿Quién será el nuevo chico del vecindario?

¿Qué nuevos enigmas le tocará a Allison que descubrir?

¿Será su madre la verdadera?

No lo sé, díganme qué piensan lectores hermosos.

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