LOVE BOX ☘️ [BTS]

JO-AH! 🍬NJ

Después de tres años ¿quizá?... ¡VOLVÍ!

Dado a que nadie escribe que OTP le gustaría leer en el siguiente cap (lo que me da a entender que realmente escribo del asco y debería dejar esto :v) colocaré cualquier shipp que venga a mi mente ;-;

Gracias por leer 7u7

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NAMJOON

Llevaba alrededor de dos meses viviendo solo. Dejé el hogar de mis padres al no soportar más sus gritos, peleas y órdenes que siempre me daban.

¡Es que joder!¡ ¡Tengo veinticuatro años, no tres!

Acepto su sobreprotección conmigo causada por cada cosa que ven en la televisión y sí, tienen razón. Este mundo está cada día más jodido.

Hace poco terminé de acomodar mis pocas pertenencias en el apartamento. Sé que duré demasiado en hacerlo. El trabajo me tenía atrapado, soy nuevo en la empresa. No podía darme el lujo de dejar cosas sin hacer.

Mi espalda dolía horrores, mi celular no dejaba de vibrar en mi mesita de noche.

Contesto el teléfono y la voz de mi amigo Jackson me recibe del otro lado de la línea.

-¡Hey Nam! A que no adivinas, acaba de llegar Mark de Nueva York y BamBam quiere hacerle una fiesta sorpresa. Está reuniendo gente ¿te apuntas?- su voz es tan chillona y entusiasta que me es difícil decirle no.

-Claro amigo. ¿Qué día es?-

-¡Hoy, ya mismo! ¡Duh!- casi se me cae el celular por su grito.

-¿Qué? ¿Ya? ¡Estás loco, bro! ¿Salir ahora con este maldito frío? ¡Nah, nada mejor que la calidez de mis mantas!-

-No jodas, cámbiate de ropa. Aquí te espero- sin decir más cuelga la llamada. ¡Aish! No me queda de otra que hacer justo lo que mi amigo dijo. Duro eternidades eligiendo la ropa que me pondré. Decido una camisa amarilla, botas rosas, pantalón gris, chaqueta de cuero ¿terrorista de la moda? ¿Dónde? Por fin termino al peinarme y aplicar perfume. Corro al salir de mi apartamento.

El pequeño BamBam me recibe ya notablemente ebrio al abrir la puerta. A Mark ni lo veo al estar enredado entre los brazos de Jackson junto con una chica pálida, delicada. Seguro van a hacer trío- y dicen que el pervertido soy yo; que decir del gentío bailando sobre las mesas y cuanto mueble hay en la sala. Una joven bonita me pasa un trago, luego otro chico un whisky y una rubia sexy me saca a bailar.

Decido olvidar mis preocupaciones. Al fin el día de mañana es domingo, mi día libre.

Son las tres de la mañana. No sé quién soy yo, quien eres tú y que hago en este lugar. Bailé hasta con el perro, me bebí hasta el agua de las matas de la sala y creo que hasta hice pis en más de una. Jackson y Hoseok -un amigo de Mark, el cual conoció en Nueva York y que por una extraña razón venía en el mismo vuelo que él- arrastran mi borracho trasero hasta la avenida principal y me botan en la parte de atrás de un taxi. Llevo en mi boca un pito de esos que se enroscan y desenroscan al soplar, sin parar de murmurar: fiesta, fiesta, fiesta, que el conductor me riñe cada segundo durante el viaje. Me arroja en la acera de la casa donde vivo y se marcha. Supongo que mis amigos le dieron el dinero y mi dirección para que me trajera porque no menciona nada al respecto.

Con piernas temblando como gelatina subo las primeras escaleras, estoy ya casi en la entrada, casi en la puerta del edificio cuando unas arcadas hacen que corra en dirección al basurero al otro lado de la calle.