Capítulo 6: Una víctima

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~Narra T/N~

Era una mañana tranquila, acababa de levantarme y mi voz seguramente estaría ronca, pero de todos modos, agarré el teléfono y llamé a Adado.

-Dime.- dijo él.

-¿Como está Sam?- le pregunté.

-Bien, le duele la cabeza pero esta mejor. ¿Y tú como estas? Tu voz esta demasiado ronca.- Dijo con una risa.

-Acabo de levantarme, pero estoy bien. - le dije. -Bueno, adiós.-

-¿Tan rápido te vas? Aburrida~ - dijo burlón.

-¿Qué quieres?- le pregunté.

-Atención~- me dijo de una forma cariñosa.

-Eres tan bipolar.- dejé salir un suspiro.

Escuché el timbre. -Me llaman, voy a ver quien es.- dije.

-¿Vas a abrir con las pintas de recién levantada? -bromeó Adao.

-No sabes ni que pintas llevo, además, no abriré la puerta, solo preguntaré. - le dije.

-Esta bien~ Adiós esclava fea.- me dijo.

-Adiós. - Dejé el teléfono a mi lado y me levanté como pude.

Me acerqué a la puerta . -¿Quién es? - pregunté.

-Soy yo, Kevin.- ¡Mierda! ¿Qué hace él aquí? No puedo abrirle si estoy asi.

-Eh, ¡espera un momento!- le dije.

Me fuí corriendo a vestirme y me peine rapidamente. Corría de un lado a otro del apartamento para verme decente. Dentro de un tiempo, le abrí.

-Hola.- le dije con una sonrisa.

-Hola, ¿Puedo pasar? - me preguntó.

Asentí y me hicé a un lado. Cerré la puerta tras de mí. -¿Qué pasa?, ¿Por qué está visita tan inesperada?- le pregunté.

-T/N...-se acercó a mí, yo retrocedí hasta golpearme con la puerta, mi cara estaba ruborizada.

Él se acercó tanto a mí que nos separaba unos pocos centímetros. Su mano subió hasta mi mejilla y la empezó a acariciar.

-Kevin...-susurré sonrojada y con la mirada baja.

De repente se aparto de mí. -Perdona... ¿Sabes como está Sam? - me preguntó para cambiar el tema.

-Bien...- le dije todavía nerviosa y levemente sonrojada.

¿Por que ha hecho eso?, ¿Esta enamorado de mí? , ¿Ha venido solamente para esto?

-Solamente queria saber por la salud de Sam y también queria verte, por eso he venido pero... Creo que me ire ya.- dijo mientras abría la puerta. -Adiós T/N...- dijo avergonzado mientras salía y cerraba la puerta.

Me fuí al baño, me recogí el cabello en una coleta y me tumbé sobre el sofá del salón mientras dejaba salir un suspiro. ¿Qué mierda esta pasando aqui?, ¿Por qué se ha puesto asi de repente?, ¿Estará ebrio? Miles de preguntas pasaban por mi cabeza. Me levanté y me puse a cuidar de la casa.

Por la tarde salí a comprar y mientras andaba, pensaba en todo lo que me ha pasado; sobre todo lo de Kevin. De repente me choqué contra una chica, se le cayeron las bolsas que llevaba.

-¡Lo siento!- dije avergonzada mientras me agachaba para recoger sus bolsas y darselas.

-No te preocupes.- dijo la chica bajita de cabellos castaños amablemente mientras recogía la bolsa que le dí. Me mostró una sonrisa. -¿Estás bien? Es que soy muy torpe...- me preguntó.

-Tranquila, la culpa es mía. ¿Está usted bien? - le pregunté.

-Sí, gracias. Bueno, adiós. - me dijo mientras caminaba y me mostraba su dulce sonrisa.

Era una chica bastante linda y amable.

Volví a casa, me tumbe en el sofá y cerré los ojos cansada. Un gritó de los vecinos hizó que me despertará.

Salí al balcón para escuchar mejor.

-¡Detente! - oí un grito de una chica.

-¡No volverás a salir sola de esta casa! ¡Maldita puta! - se escuchó un grito masculino, continuado de un golpe.

Violencia de género,eso era aquello.

Rápidamente agarré las llaves y salí dispuesta a detener aquello.

Golpeé la puerta del departamento de aquella pareja y el chico me abrió.

-¿Sí?- preguntó sonriente.

-Hola, ¿podría parar de maltratar a su pareja o tengo que llamar a la policía? - dije mientras agarraba el teléfono.

-Yo no estoy maltratando a nadie.- me dijo él.

-¿Crees que soy estúpida y que no escuchó los gritos ni golpes?- dije enfadada.

El chico me agarró la muñeca produciendo que soltará mi teléfono y rapidamente me golpeó.

No dije nada, simplemente le pegé una patada en su zona baja produciendole que me soltará.

-¿Qué esta pasando aquí?- se escuchó una voz molesta de fondo. Me giré y ví a Adao. ¿Es qué este hombre está en todos lados?

El maltratador, sin decir nada, se fue.

De repente, la victima de aquella violencia, salió del departamento, la miré y era la misma chica que encontré hoy mientras caminaba.

Realmente no podía creerlo.

Tu esclava~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora