Capítulo 4: "¿Qué somos, sunbae?"

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—Sunbae —dije mientras él sacaba su libreta, como es de costumbre— ¿Algún día podré leer alguna de sus canciones?

—Quizás cuando seamos más cercanos.

—¿Qué somos nosotros, sunbae? —pregunté relamiendo mis labios gracias a los nervios que comenzaban a inundarme a medida que las palabras salían de mi garganta.

—¿Nosotros? —Dejó de hacer lo suyo para mirarme fijamente— ¿Relación pianista-mocoso? —preguntó buscando alguna aprobación o negación en cuanto a cómo había llamado nuestra relación, pero no hice más que desviar mi vista.

—Comprendo —murmuré, sintiéndome estúpido por creer que podría considerarme un amigo.

El resto del tiempo transcurrió normal, él tocó y yo escuché mientras leía un libro que me había recomendado NamJoon-hyung. Pero cuando todo terminó y él estaba por irse del cuarto, habló.

—Me gustaría tener tu número, mocoso.

Al escuchar sus palabras, tragué saliva, nervioso, y rápidamente comencé a buscar algo de valor dentro de mí, para darme la vuelta y darle mi número como lo haría una persona normal. ¿Por qué siempre se apoderaban de mí los nervios?

Pianista-mocoso, eso era todo. Tenlo claro de una maldita vez, JiMin. ¡Deja de emocionarte por todo! —Me regañé mentalmente.

—Claro —musité a penas, sintiendo mi corazón a punto de estallar.

Me di la vuelta y cuando salí ese día de aquella sala, tenía el número de Min YoonGi en mis manos.

Llegué más rápido de lo que creí a casa y me tiré sobre la cama con emoción, retorciéndome mientras abrazaba con fuerza mi almohada, tratando de liberar todos los positivos sentimientos que habían estado siendo contenidos hasta el momento.

—YoonGi-nim —murmuré para mí mismo, buscando el celular que estaba dentro de mi mochila.

A penas lo encontré busqué Kakao Talk entre mis aplicaciones.

Relamí mis labios tratando de calmar mis nervios y simplemente envié el mensaje que había pensado durante todo el trayecto hasta llegar a casa, esperando que sonara casual y para nada desesperado.

"Que tenga una linda tarde-noche, sunbae."

Automáticamente apagué el móvil y escuchando los desenfrenados latidos de mi corazón, quise pensar en todo lo que había pasado hasta llegar a este punto.

La primera vez que lo oí tocar fue cuando a Tae se le habían olvidado algunos cuadernos que necesitábamos para estudiar, y tuve que darme el trabajo de ir rápidamente a la escuela, rezando porque el aula estuviera abierta, y para mi sorpresa sí lo estaba. De vuelta, mucho más tranquilo por poder tener los libros entre mis brazos, escuché a lo lejos la melodía de un piano que logró erizarme la piel.

De manera casi instantánea, me volteé sobre mis talones y comencé a seguirla con curiosidad, queriendo saber quién era el que estaba provocando aquella hermosa música.

Era la melodía de un viejo piano, provocada por Min YoonGi, el chico que robó por completo mi corazón con tan solo un instrumento.

YoonGi-nim 

"Igualmente, JiMin. Nos vemos mañana. Descansa."

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Hola. Muchas gracias por leer hasta este punto, se los agradezco mucho. 

Pues, no creí que recibiría tanto apoyo y ahora que llegué hasta este capítulo no sé qué hacer. Les explicaré un poco más la situación:

Pues esta historia la creé como un pequeño complemento para un libro con muchas historias YoonMin que subiría una de las autoras que sigo, por el cumpleaños de YoonGi. Todo era una dinámica.

Hace poco la encontré de nuevo, la corregí y la subí al grupo de Facebook, como tuvo un gran recibimiento decidí subirla a Wattpad.

Leyéndola me di cuenta de que la historia podría dar más que desear, o sea, mayor desenvoltura de los personajes, más trama y todo eso. Así que ahora vengo a preguntar lo decisivo...

¿Dejo este capítulo como el final de la historia o continúo publicando más?

Ustedes deciden y si deciden dejar este como el final, yo continuaré con la historia pero en Word. Eso es todo, muchas gracias por todo :D

-Avilio

La melodía de un viejo piano [YM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora