Capítulo 5

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Scarlett

Es increíble cómo este chico es tan amable conmigo. Cuando pensé en venir aquí, me imaginaba que tendría que estar escondida para que no me vieran.

No voy a poder volver a mi planeta. En parte me alegra, porque Mary Mandona haría que me cortaran la cabeza.

Luke es más alto que yo. Tiene la piel morena y el pelo castaño. Sus ojos son marrones miel. Me veo rara a su lado. Yo soy azul con el pelo de colores, como todos los habitantes de Platinium.

Me hace seña para que no haga ruido, aquí también deben de tener unos horarios.

Vaya golpe me he dado en la cabeza, estoy mareada.

Aún encima este humano es muy pesado. No calla un segundo la boca. Me mata a preguntas.

- ¿Cómo es tu planeta?

- Horrible.

- ¿Está muy lejos?

- A unos 9852964810 km.

- ¿Tenéis poderes?

- No.

Me lleva a su habitación, que para mi sorpresa está llena de imágenes del espacio, estrellas, satélites, planetas...

- Parece que todo esto te gusta - le digo mientras abre un botiquín y me cura la herida de la cara.

- El espacio me apasiona, y que una alien se estrellara en frente de mi casa es lo mejor, mi deseo de cumpleaños se va a cumplir, descubrir los misterios de allí arriba y algún día viajar al espacio.

- ¿Hoy es tu cumpleaños? - le pregunto curiosa.

- Sí.

- ¿En serio? El mío también.

- Guau, esto es increíble. ¿Cumples dieciocho?

- Sí, mira - saco de mi bolsillo el pequeño meteoro y se lo enseño - lo cogí hoy en la lluvia de estrellas y le grabé la fecha de hoy :

09^87#00.

- Eso no es la fecha de hoy.

- ¿Cómo que no? - le pregunto - ¿Sabes en que día vives?

- Sí, pero supongo que será diferente, por ejemplo, ¿en qué época del año estáis en Platinium?

- Invierno, y aquí es verano.

- Exacto, aquí la fecha de hoy es esta - busca en su cajón y saca una piedra muy bonita y escribe en ella: 03-09-14 - mira, la encontré en la playa el otro día. Es para ti. Sé que no es un gran regalo pero...

- Me encanta, toma - le doy el pequeño meteorito - tú tendrás algo de mi mundo y yo tendré algo del tuyo.

Nos quedamos los dos en silencio.

- Mira, no sé tú, pero yo tengo mucho sueño - dice - he estado de fiesta así que dormiremos y mañana te enseñaré el planeta Tierra, bueno, mi ciudad.

- ¿No tenéis horarios?

- ¿A qué te refieres?

- Una hora concreta a la que ir a dormir.

- No, al menos en verano, no tengo que madrugar y eso.

Justo en el momento en el que iba a hablar, una chica con el pelo corto castaño abre la puerta diciendo:

- Luke, ¿qué es este barullo? ¿Con quién... - en el momento en el que me ve se queda inmóvil y antes de que se desmalle, corro a sujetarla.

¿Alien o humana?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora