-¿y cuál es la segunda sorpresa?- pregunto aún más extasiada Lyonne
-bueno la segunda noticia es qué hay alguien más en vida, desde hace unos meses, lo mantuvimos en secreto hasta ahora--¿quien es?- las dos la miraron atentas
-bueno el es....--¡linda ya llegue!- una voz conocida interrumpió su revelación.
-es el- sonreído la joven.Natasha y Paulson intercambiaron miradas, para después correr a ver de quien se trataba.
-¡¿en serio es el?!-
-¿hola?- hablo el hombre-Lana..... no lo puedo creer ¿es el tu novio?-
-Wow es la primera vez que escucho esa pregunta- el sujeto estaba sorprendido.-si chicas- cruzó por en medio de ellas dos, hasta llegar y abrazarlo -si es el mi novio- dijo con orgullo.
En respuesta, el paso su mano por la cintura de la joven, para tenerla más cerca, y un brillo apareció en los ojos de ambos, ese brillo que Sarah solo había notado en sus padres, y Lyonne en Laura y Taylor.
-¡Wow! Es más hermoso de lo que parece en la pantalla- Natasha seguía en shock, no quitaba la vista del azul de los ojos de el muchacho.
-que maleducado soy disculpen- soltó a su novia -me llamo Zachary David Alexander Efron- les estiró la mano
-pero ustedes pueden llamarme Zac Efron- les dio una sonrisa galante
-esto merece una gran explicación- por fin Lyonne formuló una oración coherente.
Laura llegó a su departamento, prendió la televisión a todo volumen y se metió a darse una ducha.
Una vez el temor de perder a Taylor de su vida, se hizo presente.
Pero esta vez era distinto, esta vez de verdad tenía miedo, ya que sabía que si ella se iba, se quedaría sola.
La preocupación de esta vez, era más grande, más dolorosa más estresante.
Salió de la ducha, y se vistió, fue la cocina y se preparó un té, al cual le puso un toque de tequila, esperando que esté le ayudara a calmar sus ansías.
Se sentó frente a la tele, le bajo un poco el volumen y empezó a cambiar los canales, buscando algo interesante.
Su celular sonó, era Dany e indecisa tomo la llamada.
-hola Dany- dijo sin ganas
-¡hermanita! ¿Donde estabas? Trate de comunicarme contigo y tu no tus luces-
-perdón salí de viaje, necesitaba reencontrarme conmigo misma- mintió
-¿pero todo bien?-
-si ya todo está bien, no te preocupes, mañana iré a la iglesia. Si esa era tu duda-
-en realidad si, estuvieron preguntando por ti, durante las últimas dos semanas-