Capitulo N°9

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El calor me reconforta y me siento tan cómoda y a gusto que sin querer me quedo dormida.

De repente escucho que susurran mi nombre. Abro mis ojos y veo al verdugo salvador que esta mirándome una vez más muy intensamente. Observo a mi alrededor, y estoy en mi habitación, metida dentro de la cama… no recuerdo haber dormido tanto como para haber llegado a mi casa tan rápido… sea como sea, esta persona extraña me salvo…

- Gracias… todavía no sé cómo te llamas, pero gracias… si no hubieras llegado yo…

- Shhh.. no hables, te golpeaste la cabeza y aunque no es nada, no conviene que hables mucho – me dice interrumpiéndome. Hace una pausa... – Demetriu…

- Demetriu? - digo

- No querías saber cómo me llamo? – me dice mientras se sienta en la cama, al lado mío. Su aura no se ve, al parecer la neutralizo otra vez.

- Lindo nombre. Gracias nuevamente… Demetriu – digo, mientras él sonríe y baja la mirada.

- Puedo preguntarte que hacías ahí… en ese preciso momento? – Necesito saber porqué un verdugo asesino ahora se convierte en ángel de la guarda.

- Voy a estar cerca vigilándote… eso te dije, y eso hice. Te metiste en problemas y te ayude… nada más. – me mira ahora fijo… sus ojos me matan…

- Pensé que lo tuyo no era precisamente salvar personas… - que disculpe mi sarcasmo, pero no puedo evitarlo

- Pensaste bien, es la primera vez que le salvo la vida a alguien…. y todavía no me explico porqué lo hice – no aparta sus ojos de los míos… esta serio y casi no pestañea… mi corazón empieza a agitarse y comienzo a sentir una sensación extraña en la pansa…

- Puedo sentir que no sos una mala persona, pero por alguna razón tu aura es la más oscura que sentí en mi vida. Demetriu…el sujeto que murió en el shopping… dicen que murió de un ataque al corazón, pero…

- Zoe, no preguntes lo que no tenés que saber…- Vuelve a interrumpirme antes de que termine de decir lo que pensaba. Lo siento mucho, pero cuando algo me interesa no paro…

- Demetriu, no podes pretender que no me interese saber más de vos…- la sensación extraña que tenía en la pansa sube un grado de intensidad, y siento mis mejillas calientes – Por favor, creo que te pude demostrar que sé guardar secretos, o no? – le pregunto

- Zoe, no cuestión de saber o no guardar secretos… prefiero mantenerte al margen. Además… ya hablaste mucho, y debes descansar. – dice mientras se levanta de la cama y se acerca a mi inclinándose, hasta quedar prácticamente a centímetros de distancia su cara de la mía. Mi corazón galopa fuerte, tengo dinosaurios en la pansa y mis cachetes deben estar como lava en erupción, me mira muy intensamente…

- Voy a seguir vigilándola señorita – dice mientras me da un beso tierno en la frente. Puedo escuchar que luego emite un suspiro profundo…  y vuelve a mirarme. Yo aprovecho para mirarlo y hago puchero… otra vez huye sin darme respuestas… él sonríe mostrando sus dientes

- Nada de pucheros… cerra los ojos… - me dice muy suave, sin oponerme hago caso a su orden… y al instante siento una brisa que mueve mi pelo… abro los ojos y ya no está. Me pregunto cómo lo hace, y me pregunto tantas cosas que podría escribir cada pregunta en un cuaderno, y empezaría otro. Lo único que va aclarándose en mí, es que su presencia lejos de incomodarme, me provoca sensaciones que nunca antes había experimentado… y cuando estamos cerca, el corazón quiere salir de mi pecho…, no sé cuándo ni cómo fue, pero creo que estoy empezando enamorarme de este sujeto…

Oscura Atracción...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora