~ Dime Te Amo ~ ♡ Park Jihoon & Tu ♡

~Capítulo 20~ La verdad

Desayunaba y miraba mi celular continuamente, esperaba el mensaje de las chicas para que me dijieran cuando practicariamos nuevamente.
No falta mucho para mi gira ni tampoco para la de Wanna-one.
El cumpleaños de Jihoon es pasado mañana y aún no se nada de él.
La depresión está acabando conmigo. Creí que había encontrado al amor de mi vida, creí que siempre estaría conmigo pero al parecer la vida me engañó.
Él no está en persona pero si está por todos lados.
Carteles por la calle, publicidades, mensajes de todos diciendo "¿Dónde está Park Jihoon?".
Y es verdad, dónde estás Jihoon?

*suena el timbre*

Al escuchar el timbre me levanto de un salto y voy a abrirle la puerta a Jungkook.
Ya pasó una semana así que nos vamos a juntar para hablar de muchas cosas, entre ellas el por qué Jihoon se fue de la casa ya que cuando quedamos para encontrarnos me surgió un problema con la empresa ya que teníamos una junta sobre un nuevo álbum.
Le abrí a Jungkook.

Tu:Buen día! *alegre*

Jk:Hola chiquilla, estás lista para ir?

Tu:Así es*asenti*

Jk:Entonces vamos!

Tomé las llaves y nos fuimos a caminar.

Tu:Dónde vamos?

Jk:A un acuario

Tu:Qu-e? *dije casi llorando de la risa*

Jk:Allí te explicaré todo T/n

Tu:Okey pero, por qué allí?

Jk:Me gusta ese lugar

Tu:Okey si tu dices..*dije algo desconfiada*

Llegamos y por suerte no había mucha gente, eran hermosos lo peces.
Al principio caminamos y charlamos de temas normales sin ninguna importancia.
Caminamos un poco más y llegamos a un lugar donde había un restaurante, pero, si mirabas arriba podías ver millones de peces, es hermoso.

Jk:Qué quieres pedir? Yo invito *sonrió*

Tu:Me gustaría algo no tan pesado*dije mientras miraba la carta con las variedades de comidas y bebidas*

Jk:Que tal esto? Te gusta?

Tu:Claro! Pedimos eso?

Jk:Si

Vino el camarero y anotó nuestra orden, se fue y al rato volvió con la comida.
Mientras comíamos seguíamos hablando de cualquier asunto, por ejemplo sobre mi grupo.
Al terminar Jungkook se puso serio y me miró.

Tu:Sucede algo kookie?

Jk:Quieres que te cuente?*movía los cubiertos y los miraba nerviosamente* Ten en cuenta que jamás se lo conté a nadie así que...quizás me cueste...

Tu:No pasa nada si quieres parar solo hazlo*dije amablemente y él comenzó a narrar*

Jk:Jihoon es tratado como el mejor en todo y lo acepto es la mejor persona que puedes conocer, ojo, no lo digo porque sea mi hermano. Aún así tiene un cierto límite de paciencia.
Éramos pequeños, 8 o 9 años teníamos...y debido a que nuestros padres no estaban siempre en casa decidieron mandarnos a una guardería, una horrible...guardería.....
Llegamos y un hombre alto nos atendió, era el dueño del lugar.
Tenía unos 41 o 42 años..perdón ya perdí la cuenta.
En fín, nuestros padres se fueron y nos dejaron allí con ese señor extraño.
Pero, era una persona muy amable, siempre jugaba con nosotros y siempre nos trataba bien. Pasaron meses y el señor era como nuestro mejor amigo, lo amabamos.
Lo que si, había una música que siempre sonada en la guardería y era insoportable la verdadverdad.
Un día él nos preguntó "¿Qué quieren ser cuando sean mayores?" y yo le respondí primero, luego Jihoon.
"Idol" dijo él.
"Idol? Sabes que es eso verdad?" dijo el señor, "si" aclaró mi hermano. El hombre se puso nervioso y sus venas resaltaban por sus brazos.
"Ven un momento Jihonnie" le dijo a él.
Entonces entraron en una habitación a solas.
Yo no entré ni tampoco logré escuchar ni saber lo que había pasado allí a adentro pero fuera lo que fuera Jihoon no habló nunca más sobre ser idol.
Pasaron dos horas, lo recuerdo perfectamente. Se abrió la puerta y él salió pálido, con la mirada perdida, no hablaba ni
Sonreía.
Más tarde el hombre salió para recibir a mis padres que nos venían a buscar. Cuando salió su rostro estaba cubierto de vendas con manchas de sangre.
Mis padres se preocuparon y él les dijo que se calló y se cortó por accidente.
Le pregunté en la vuelta a casa que había pasado pero él negaba con la cabeza. Algo vio ahí adentro y eso lo traumo por el resto de su vida.
Cuando llegamos tuve una charla con mis padres, y yo les conté lo único que sabía, entonces, la culpa de los cortes del hombre habían sido dirigidas a mi hermano.
Pasaron 3 años más y de allí nos despedimos del señor ya que podíamos cuidarnos solos.
Sentí la alegría que tenía Jihoon.
Durante esos 4 años que estuvimos con ese hombre él no había sonreído nuevamente.
Pero por suerte los años siguieron pasando.
Ya éramos mayores de edad, ya teníamos nuestros estudios, ya sabíamos cuidarnos, la felicidad volaba alrededor nuestro, pero no ese día.
Papá entró muy feliz a la cocina, saludó a todos. Jihoon y yo comíamos.
Nuestro padre se comenzó a sacar el reloj mientras nos comentaba.