Caótico.

9

-¿Cómo abriste la caja de metal en mi armario?

-¿Que?

Yoongi se puso de pie lentamente, girándose para enfrentarlo. La cara seria que mantenía hacía tan difícil leer lo que estaba pensando. Sus labios se apretaron en una línea apretada. 

Taehyung lo miró, fingiendo inocencia y trató de actuar como si el asunto no le preocupara en absoluto. Pero si viera sus manos apretadas debajo de la que vería a través de la fachada que puso directamente. 

 -Yoongi, admito que fui a tu habitación, ya que deseaba limpiando y lo vi, lo toqué pero no pude abrirlo. ¿Qué hay dentro? ¿Es importante?

Taehyung se levantó descaradamente y recogió las pajitas de las flores y las puso casualmente en el cubo de basura. Nervioso sería una gran subestimación. 

Cruzó los brazos y se apoyó en el pilar cuando él tomó medidas para acercarse a él.

Inclinándose cerca de su oreja, rodeó su cintura con sus brazos y apoyó la barbilla en el hueco de su cuello. 

-Te creo.- susurró y casi se relajó, pero un escalofrío subió por su columna vertebral cuando dejó una suave risita.  

-No.- Se retiró y sopló un mechón de cabello que cayó sobre su cara.

 -Cariño, has mejorado mucho, creo que puedes convertirte en actor.- Rió y sacó un pedazo de sobre amarillo de su bolsillo.

-Encontré esto en la esquina del armario, mirando hacia afuera, se suponía que estaba en la caja. ¿Se teletransportó? ¿Hm?- Se burló y dejó caer la sonrisa. La sonrisa amenazadora.

-Yo... realmente no lo hice!- Se defendió. Sintiendo como sus rodillas temblaban y Yoongi definitivamente lo notó.

-Taehyung-ah, no tienes que tener tanto miedo. La curiosidad no es algo malo.- acarició su mejilla y quemó su piel. Tan absolutamente frío, que le recuerda a un cadáver.

 -Pero a veces, la curiosidad mató al jodido gato. Dime, ¿cuánto pudiste ver?- Taehyung se mordió los labios para evitar que temblaran tanto, su corazón se aceleró de miedo y, al mirarlo, no pudo deducir nada más que engañarlo como un demonio.

-Yo... solo vi la foto y - y el anillo.-  lo sintió agarrar su barbilla y mirar sus ojos con sus huecos. Parecían huecos.

-¿Nada más?

-Sí, viniste a casa, así que me asusté y yo—

-¿Desordenado, paranoico, caído?- Continuó su oración y lo agarró de la muñeca.Este tipo de Yoongi le asusta más. 

No es violento, no hay abuso verbal. Pero sus juegos mentales lo hacían sentir tan jodidamente retorcido e inusual, todas las células de su cuerpo gritaban y se sentían como si se estuvieran apagando una por una.

-Cariño, ¿cómo lo abriste? ¿Usaste la fuerza? Dudo. Entonces, ¿dónde está la llave?- Le preguntó con calma mientras el rubio estaba teniendo una crisis nerviosa y aterrorizado por la intención escondida detrás de sus palabras.

Llevándolo hasta la escalera a la derecha, lo agitó y el jarrón de arcilla decorativo se hizo añicos. Haciendo que sea mucho más fácil conseguir la llave.

Se lo dio y Yoongi le dio unas palmaditas en la cabeza para luego mirarlo con frialdad.

-¿Qué se enteró de su investigación, querido detective?- Él preguntó burlonamente, sin embargo, Taehyung permaneció en silencio. ¿Puede realmente ser el Yoongi que conoció cuando tenía solo 5 años?