Prólogo.

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Ella era tan perfecta, tan hermosa que no creía que fuera real.
Era tan tímida y cariñosa que me daban ganas de empacarla y llevarla conmigo siempre.

Pero eso sólo significaba peligro, sólo significaba ponerla en riesgo, lástima que en ese momento no lo pensé. Le hice caso a mi corazón y la llevé conmigo, la convertí en un blanco bastante fácil y me la arrebataron. Ahora años después aún no puedo olvidarla, pero como un hechizo tentador vuelve, simplemente vuelve.

¿Pueden dos personas ser tan idénticas, pero tan diferentes a la vez?

Deseos Oscuros II (Vehemencia)©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora