Parte 13

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Ginny se sentía como si le hubiesen arrojado un hechizo aturdidor. ¿Qué quería decir Albus con eso? No podía ser. Draco Malfoy no solo podría ser su padre, le había hecho mucho daño a su familia en el pasado, y si bien con el tiempo se había esforzado en repararlo e intentar ser mejor persona, simplemente no podía imaginar que su hijo sintiera algo por él. Era muy doloroso para ella, porque no quería juzgar más a Albus, no quería que nuevamente su hijo se alejara de ellos, quería apoyarlo, pero bajo ninguna circunstancia quería que eso fuera real. Aunque tal vez ella había entendido todo mal. Respiró tranquilamente antes de hablar.

—Albus... creo que no te entendí bien. Lo siento.

—No mamá. Si me entendiste. Es justo lo que tú entendiste. Lo siento mamá.

La pelirroja solo atinó a abrazar a su hijo. Era lo único que podía hacer. Eso, y rogar por que su hijo se enamorara por completo de Scorpius Malfoy y olvidara de inmediato aquella idea loca que se había cruzado por su mente. Quizá la pelea con Scorpius lo había confundido. Quizá simplemente Draco fue amable con él, y como Albus es un chico muy ingenuo se ilusionó. No tenía que preocuparse. Su hijo era un adolescente muy sensible, era natural que se sintiera atraído por alguien con el atractivo de Malfoy.

—Hijo... está bien. Bueno... no. Es decir... no quiero que me malinterpretes Al —dijo rápidamente ante la mirada decepcionada de su hijo— es solo que... Draco... tiene la edad de Harry ya sabes, es algo mayor, y las cosas entre nosotros... no es fácil, bebé. Es normal que me preocupe, yo solo quiero que aclares bien tus sentimientos... que arregles las cosas con Scorpius. Se nota que él te quiere...

—Si mamá, me quiere tanto que a penas tuvo la oportunidad me dejó abandonado en su propia casa por irse con... con Rose.

—Bueno hijo, ya tendrás tiempo de conocer a muchas personas más —le dijo Ginny mientras lo abrazaba— mi pequeño Albus...

Albus lloró en los brazos de su madre. Se sentía completamente avergonzado y débil por contarle. Ese era su mayor secreto, y debería haberlo ocultado para siempre, pero necesitaba tanto sentir ese tacto, sentirse querido, apoyado.

—Gracias mamá... tienes razón. Mañana hablaré con Scorp... trataré de solucionar esto. Y tienes razón lo de Draco... si, creo que solo me confundí. —Muy en el fondo de su corazón sabía que no era del todo cierto, quizá si, se había ilusionado rápido con Draco, pero lo que decía era solo para tranquilizar a su madre.

Ginny se fue a acostar preocupada, pero cuando Harry le preguntó que ocurría, solo se limitó a responder "nada, cosas de adolescentes".

Albus no lograba conciliar el sueño. Solo podía pensar en una cosa: Draco Malfoy. Se odiaba a si mismo por obsesionarse tan rápido, pero era algo más fuerte que él, una atracción más allá de lo que podía entender. ¿Y qué pasaba con Scorpius? Bueno, Scorp era otro tema. Sabía que adoraba a Scorpius Malfoy, pero después de ver como había actuado no sabía si quería que su amistad fuera más que amistad, aunque no sabía si eso se debía a que estaba dolido o a su nuevo y repentino enamoramiento. Ahora, cualquiera de las dos situaciones era compleja. Se había besado con Draco, y si se llegara a enamorar de Malfoy padre sería algo completamente imposible, no solo por todas las razones que le había dado su madre, sino porque era el padre de su mejor amigo. Ahora, si algo llegara a pasar con Scorpius... como podría estar con él si se había besado con su padre... es más, ya seguir como amigos se volvía difícil en esa situación.

—Malditos Malfoy —fue lo último que pensó antes de dormir.

Wrong LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora