Nunca es tarde...

Nacimiento.

—Si quiero—le dije a Derick, me miró un momento y luego enterró su cara en mi cuello dandome pequebesitos ahí.

  MESES DESPUES...

— Listo, ya las peiné—les dije a a Catalina y Mariana—quedaron hermosas.

Las gemelas me dieron un besito cada una.

—Gracias tia Jany—contestaron a coro. Les sonreí, pero mi sonrisa se borró cuando sentí que rompí fuente y a los pocos segundos contracciones.

—Tia ¿estás bien?—me preguntó Catalina acercándose 

—Niñas ¿pueden ir a buscar a su tio, por favor? —traté de hablar con calma para no asustarlas

Las gemelas salieron corriendo, mientras yo seguia con contracciones , a duras penas me puse de pie y fui a encontrarlos.

Estábamos en mi  casa, en una pequeña reunión familiar, John, las gemelas, Dani, Derick y yo, porque  Eric y Steven estaban en casa de este último, se había llevado practicamente todas sus cosas. Derick ahora vivia conmigo. Y Dani, su marido y sus hijas se quedaban algunos fines de semana aqui. Los encontré a todos corriendo a la sala donde había estado unos segundos antes peinando a Catalina y Mariana. Estaban preparando algunas cosas para irnos de picnic, bueno, cambio de planes. Personita quiere conocernos ya. Así que haremos picnic en el hospital, ¡Hurra!

—¿Nena ¿está bien? Las gemelas me dijeron que algo te pasaba.—Derick se puso a mi lado.

Yo estaba medio doblada apoyada en la pared.

—Creo...creo que ya estoy lista—le respondí casi en un susurro, no es que crea que si hablo más bajito el dolor se iria.

—¿Segura?

Solo lo miré.

—¿Qué clase de pregunta es esa Derick?—le reprendió su hermana—por estas razones los hombre no dan a luz.

—Entendí, fue una pregunta tonta.

—Lo fue y si estoy segura

Derick se movilizó, me ayudó a llegar al carro mientras Dani buscaba el bolso que habíamos reorganizado, por suerte, unos días antes. Ella iria en otro carro, sola. John se quedaría con las gemelas en mi casa.

—Tengo que llamar a Diego—Para mi sorpresa Derick no protestó ni hizo alguna mueca de desagrado. Comencé a marcar el número de mi ex y vino otra contracción

—¿Quieres que lo haga por tí?

Lo miré asombrada.

—¿Lo harías?

—Cualquier cosa por tí amor.

—Gracias—le pasé mi teléfono.

Derick le marcó cuatro veces a Diego, nunca respondió.

—Déjalo ya bebé. Hay cuatro llamadas perdidas como evidencia de que tratamos de ponernos en contacto.

—Una vez más y si no contesta le dejamos un mensaje, ya no quedará por nosotros.

Asentí

Derick lo llamó una vez más. Nada. Entonces le dejó un corto mensaje de voz.

La enfermera entraba, comprobaba y luego salia. Derick no se separó de mi lado en ningún momento. Tampoco protestaba cuando le apretaba la mano por una contracción.

—Eric, Steven y mi hermana están afuera. Dani dice que no se mueve de aquí hasta conocer a su sobrina.

Así es, para Dani, Tiana era su sobrina y yo estaba encantada por eso. Por parte de Diego ,Personita tendría abuelos, primos y tios, pero estos de acá tambien lo serian. Eric segun me dijo Derick llegó tan pronto como Daniela le dijo y Steven llegó con él. John llamaba cada cierto tiempo o Dani lo llamaba a él para que le contara los avances. Diego aun no llamaba y en secreto me alegraba, queria a Derick a mi lado y que fuera el primero en ver a mi hija cuando ella decidiera  llegar a conocer este mundo que y a las personas que la esperaban anciosa.

—Me encanta que estés aqui conmigo.

—De aquí no me saca nadie—me besó la sudorosa frente.—Te amo.

—Te amo más.

Por fin escuché el llanto de mi bebé, si que tenia energías, las que me faltan a mí, inmediatamente Derick se soltó de mi agarre y fue a ver a Tiana y regresó con ella envuelta en una sábana.

—Mírala bebé, es hermosa—me miró con lágrimas en los ojos.—como tú.

Yo tambien lloraba y esta vez no por dolor.  Ver por primera vez a mi hija me hizo sentir algo que no puedo explicar. miré a Derick

—Si, es hermosa.

La toqué, su carita, sus manitas, su naricita. La amo, ella es el amor de mi vida, haré lo que sea porque esté a salvo y feliz.

Cuando dejaron entrar a los demas, entraron todos muy calladitos para no despertar a una Tiana profundamente dormida. Y ¡Sorpresa! ¡Sorpresa! El mismisimo Diego en persona.

—Siento no haber llegado a tiempo.

—No te preocupes, Derick estuvo aquí todo el tiempo.

Diego abrió los ojos y luego entrecerró los ojos en mi dirección.

—¿Porqué permitiste que estuviera aquí? ¿Para que viera primero que yo  a mi hija?

—Si. Porque a él no tuve que llamarlo cinco veces y dejarle un correo de voz. Porque él estaba aquí sosteniendo mi mano mientras yo daba a luz a Tiana. Porque nos vamos a casar, porque te guste o no, Derick va a estar cerca de mi hija mucho, mucho tiempo. Diego ¿ya viste a Tiana? Ve a verla y luego vete. Estoy agotada y quiero estar con mi familia.

Diego no dijo nada más, salió y yo respiré profundo. Derick  se sentó a mi lado y besó mi nariz y mi frente.

—¿Porqué no descansas un poco? Los voy a echar de aquí para que duermas.

—Tú no te vas ¿verdad?

Negó con la cabeza, me besó en los labios e hizo que todos se fueran. Después que todods se despidieron y se fueron, Derick regresó conmigo.Poco a poco mis ojos se cerraron y para cuando los abrí, el cuarto estaba oscuro y se escuchaba el murmullo de una persona. Abrí completamente los ojos y me fijé en Derick con mi pequeña en brazos, me concentré en escuchar a ver que le decia.

—Eres tan hermosa como tu mami—beso en la frente—espero que seas tan buena como hermosa y duermas mucho para que mami descance. Ella te ama mucho ¿sabes? Y yo tambien, bueno y como no hacerlo. 

Suguió hablando, pero yo me quedé dormida otra vez. Feliz de tener un prometido tan bueno como Derick y una hermosa hija saludable.