Tal vez

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Salimos del pequeño sótano, el caminaba demasiado rápido yo apenas y lo podía seguir, estamos en un pasillo de color blanco vacío hasta que llegamos a una sala de gran tamaño, las paredes eran ventanas que daban la vista de un exterior primaveral, cuadros con dibujos míos, y de fútbol, sillones negros y cojines que combinaban, seguimos de largo, pasamos por una enorme cocina de color beige, llegamos hasta una gran escalera de caracol, el subió por unos segundos pensé en correr y encontrar la puerta, aunque posiblemente no llegaría muy lejos.
-Si no me sigues tendremos problemas amor- me dijo en un tono de voz serio, lo seguí, era mejor tenerlo contento para tener más posibilidades de hacerlo razonar.
Al llegar a lo que supuse seria el segundo piso vi una cama enorme que estaba ubicada en la mitad, de frente había un televisor de pantalla plana, más halla un armario colosal y un sofá cerca de donde habíamos entrado, junto a él lo que parecía ser la entrada del baño, no podía creerlo todo el piso estaba convertido en un cuarto.
-¿Te gusta, cierto? Es todo lo que un día me dijiste que querías- estaba  en lo correcto, en nuestros días de primaria le decía que siempre había soñado con tener una habitación que ocupará todo un piso, no podía creer que lo recordará y aun mas que lo hiciera realidad.
-Me encanta, me alegro que hayas encontrado una casa tan bonita y tan grande estarás feliz - le dije mirándolo, no sabia bien que quería el al mostrarme todo esto.
-Con que tu estés feliz me basta, todo esto es nuestro y lo he construido a tu gusto- se acercó hacia mi, yo retrocedía a cada paso que daba, mi espalda se topo con la pared haciendo que el rápidamente me encerrara en sus brazos. -Está casa es solo nuestra, por lo que esta habitación es solo para los dos ya no tendremos problema en hacer lo que queramos amor- su aliento chocaba contra mi cuello- ahora puedes gemir tan alto como quieras- mi rostro se sonrojo y antes de que pudiera responderle sentí sus labios contra los míos, intente apartarlo pero sujeto mis manos encima de mi cabeza, inmovilizadome.
-Quédate quieto y abre la boca ya veras como disfrutas- volvió a besarme con fuerza y por esta vez le hice caso, al fin y el cabo el tenia razón no era algo que no hubiéramos hecho antes y solo por esta vez lo disfrutaría.

Aunque tal vez no sea la última.

Amor solo mio -Yaoi-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora