Experto en los Fracasos (Tony Stark)

Epílogo.

-Vamos sargento, es hora de despertar.

Aquella voz que había extrañado por tanto tiempo, por fin volvía a despertarle.

Se giró hacia el castaño y este le recibió con una sonrisa tan radiante como el sol. Él se aferró a la cintura del menor y escondió el rostro en el hueco entre el cuello y el hombro de Tony.

-Tuve una pesadilla. No quiero quedarme sin ti, Anthony.

-No lo harás, cariño. Ya pasó todo, estaremos juntos y nada ni nadie nos va a poder separar. Ahora, ¿Qué te parece si tomamos un baño juntos y luego vamos a preparar nuestro desayuno?

Bucky le dio un beso lento en los labios por toda respuesta y Tony se puso de pie enseguida de que se separaron, así de una manera u otra, obligaba al soldado a salir de entre las sábanas.

-Una carrera al baño, Buckaroo. El último en llegar se encarga de lavar todo al final del desayuno.

El soldado se levantó como si hubiera tenido un resorte en la espalda y pronto alcanzó a su ingeniero.

Entraron debajo de la lluvia artificial entre besos y caricias. Pronto aquello aumentó la temperatura y terminaron entregándose de nuevo uno al otro.

-Te amo.

-También te amo, Soldado.

Fue entonces que Bucky se dio cuenta. Aquello no había sido una pesadilla, había sido real. Y ahora, después de tanto tiempo separados, estaban juntos de nuevo.

Y esta vez estaba seguro que, como su pequeño castaño había dicho anteriormente, nada ni nadie los separaría.

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Y bien, esto es todo. Agradezco infinitamente a quienes han seguido esto desde el principio hasta aquí. De verdad, jamás pensé que esto tendría tanto éxito.

Hubo veces que pensé que no podría terminarlo (por la escuela y eso -estúpida carrera :'v-), pero aquí está.

Ahora, les agradecería demasiado que pudieran darse una vuelta por "El Quinto Merodeador" y que le den una oportunidad. Esas actualizaciones van a tardar un poco más, pero como aquí, prometo no dejarlo hasta acabar.