11

45 1 0
                                    

Quisieras más vino, hubieras sido feliz nadando en el lago de vino que Jesus realizó.
A Jesus le encanta el vino.

Te imaginas nadando allí, ebria. Y entonces ahogarte, ebria.

Tomas rivotril, sertralina (toda la caja), vino tinto, y comes hierba.

Cuando tratas de caminar te sostienes de las paredes, siempre te sostienes de algo, ¡estupida!.. dejate caer.

Pero eres resistente aún sigues en pie, tocando la pared, caminando grogui, pero sigues caminando.

Quieres caminar como en el psiquiátrico de un lado a otro en ese pasillo delgado y pequeño. Hacer ejercicio allí, y ¿ qué más podrías hacer?

Hay muchas cosas divertidas que hacer en un psiquiátrico... Tomarte las pastillas de todas las internas.

Vomitar toda la noche para que al día siguiente te cuiden, que alguien te toque, una caricia, aunque sea la muñeca para introducir el líquido que te produce orinar cada dos minutos.

Entrar al baño y romper las baldosas para cortar mi garganta. Así pinto el baño de color rojo pasión.

Escuchar en la noche como tu compañera de alado se tira buenos gases y habla sola.

Escribir poesía para una amante muerta.

Molestar a los psiquiátricas amenazandolos de muerte, con ojos intensos, de esos que salen en las películas de terror.

Dar la comida pestilente, a tu compañero delgado, enterarte que se lo escucho vomitando en la noche, la noche siempre oculta, pobre bulimico, por alguna razón tenía que estar allí.

¿Ves? Se juega mucho en un psiquiátrico.

También ayudas..

Ayudas a las enfermeras a amarrar a otra interna que esta golpeando los vidrios, ayudas amarrar a la compañera a la cama, de las manos y pies.

Amarrar a alguien, en toda la vida no había hecho algo parecido, ¡qué divertido!

Jugar cartas, jugar parame la mano.

Cosas simples y divertidas.

Prosa ProzacDonde viven las historias. Descúbrelo ahora