Triángulo peligroso

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-Comencemos por el principio -continuó el fiscal- ¿De donde conoce a la victima?

-Eramos amigos -dijo Gustavo pero su voz fue solapada por la de Tomás.

-Eramos pareja -repitió Tomás para aclarar.

-¿Mantenían relaciones sexuales?

Los muchachos se miraron extrañados, la pregunta parecía un tanto obvia.

-Sí -respondió Tomás que se dio por aludido en base a su respuesta anterior.

-¿Sabía si ella tenía otras parejas sexuales?

Un recuerdo invadió al muchacho. La remembranza de Carolina teniendo sexo con Gustavo mientras él los miraba desde un sillón.

-Sí.

-¿Esto le molestaba?¿Lo hacía con su consentimiento?

-A veces.

-¿A veces qué?

-A veces me molestaba y a veces lo hacía con mi consentimiento.

-¿Puede darme el nombre de las parejas que usted conocía?

-¿Para qué?

-Pueden ser posibles sospechosos. Uno de ellos podría exonerarlo. A menos, claro, que usted declare que es culpable. En ese caso no son necesarios.

-Del único que sabía era de Gustavo -dijo mirando a su amigo, que se sonreía.

Nunca le había hecho mucha gracia la idea de compartir a la chica, pero Gustavo tenía una personalidad arrolladora. Cuando él decía algo le obedecía sin poder negarse.

-Ya veo -dijo el fiscal y tomó unas notas en su cuaderno.  

Secreto de hermanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora