Cap 4✔️

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Al despertar me dirijo a la ducha rápidamente, tengo cosas importantes que hacer una de ellas es hablar con Ethan y luego preparar los trabajos que tengo que darle a Kyle "Kyle, Kyle Kyle" dice mi mente.
Ay Lia tienes un novio con el que tienes que arreglar algunos problemas y Kyle solo es un compañero de clase y ya.

Después de tener una discusión conmigo misma y de alguna forma poner una barrera qué me encierre a mi y a Ethan sin el chico nuevo llegué a la escuela.

En cuanto vi a Ethan corrí hacia él, estaba entretenido viendo su celular; me acerque y le tape los ojos, le di un corto beso en la mejilla.

–Hola amor...

–¿Lia?

–Pues si...¿quien más?

–...– Se quedó callado y noté que se puso un poco nervioso, no le di importancia, lo único que quiero en estos momentos es que estemos bien.

–¿Me perdonas por lo de ayer?–Le dije poniendo una cara de súplica.

–Perdonada, lo prometo. Ahora ven y dame un beso, cariño.

–Como iba negarle un beso a mi lindo novio.–Me acerque a él, lo tome del cuello y le di un beso, este se fue intensificando, lo cual era extraño no habíamos tenido un beso así a mitad del pasillo de la universidad donde todo el mundo nos está viendo. Comenzó a sobar mi espalda y colocar su mano en mi cintura metiéndola debajo de mi chaqueta. Trataba de soltarme pero era imposible, hasta que mordí su labio y se alejó.

–Auu... nena, eso duele, pero me gusta. –Dijo mientras tocaba su labio que sangraba levemente y mirándome con picardia.

–Pues perdón, pero me estabas incomodando.

–Pero no te incomoda mandarme mensajes de voz donde me dices que aceptas ser mía.

–Amm... Ahora no quiero hablar de eso. Bien se supone que me haz perdonado, así que necesito que dejes de ponerte celoso porque esta tarde estaré con Kyle en la biblioteca, y ya por favor.

—Bueno pues ya que, total siempre te sales con la tuya.

—Eso es mentira él único que siempre se sale con la tuya eres tú y aceptalo.

—En ocasiones...

—La mayoría de veces.

—Lo acepto ¿feliz? Por cierto iré contigo a la biblioteca.

—Si quieres.

—Si quiero obviamente, no te dejaré ahí a lado de un desconocido.

—Bien. Tengo clase. Nos vemos en el almuerzo. —Le di un corto beso y luego me fui a clase.

Ethan

Cuando Lia se fue a su clase decidí ir a buscar a Kyle, debe de andar por alguno de los pasillos o en la cafetería, yo que sé.

Vi la hora 9:10 am obvio ese idiota ya esta en clase y yo aquí como estúpido buscando.
En lugar de encontrar a ese tal Kyle encontré a nadie más ni nadie menos que a Rebeca qué en cuanto me vio me jalo de la sudadera hacia un pasillo donde nadie más va.

—¿Qué te pasa? ¿No tuviste suficiente anoche? —Le dije juguetón y quitándome sus manos de encima.

—Aunque tenga suficiente, siempre quiero más, gatito... —Note qué alguien paso pero no le di importancia.

—Hey fuera de la cama no me llames así. —Le reproche.

—¿Cuando repetimos?

—No lo sé, pero pronto será la despedida "gatita".

—¿Y eso?

—Ya ves.

—Imagino que tu noviecita por fin te dará lo que tanto te encanta.

—Aparte de eso, creo que tomaré enserio las cosas con ella.

—JAJA. —Soltó una gran carcajada.

—¿De qué te ríes tonta?

—De las estupideces qué estás diciendo, mirate eres una basura de hombre, manteniendo el ego intacto y preocupado por la reputación de chico malo; y ella, bueno ni me cae tan bien, pero ella es algo que ni siquiera mereces.

—¡¿Estas ardida acaso?!

—¡¿Qué?! ¡Para nada!

—Eso parece.

—Solo digo que ella se cansara de ti Ethan, tan orgulloso.

—Mirate a ti una zorra, por lo menos ella está para mi cuando yo quiero y tú no tienes a nadie más que solo pasar la noche.

—Pero no esta para lo que a ti te encanta, y si de verdad la quisieras tanto no me estarías buscando.

—Yo no te busco, tú te ofreces.

—Puedes rechazarme. —La deje con la palabra en la boca y me fui, maldita zorra de mierda.

En estos momentos tengo mucho lío con lo de la tarde de ese estúpido y mi novia, y ahorita lidiar con esa estúpida zorra. Aunque tiene razón algún día Lia se cansara de mi. ¡Maldita sea! Rebecca le puede contar a Lia lo de nuestros encuentros, estoy perdido.

Me doy la vuelta y veo que Rebecca apenas va contorneando sus caderas al final del pasillo corro hasta ella, y la jalo del brazo.

—¡Ni se te ocurra decirle nada!

—Ella algún día lo va a descubrir no es tonta.

—Espero y no lo descubra por ti, porque no sabes lo que te pasaría.

—Si Ethan lo que digas. —Se soltó de mi agarre y se fue.

Me quede parado como tonto por unos minutos pensando en las posibilidades y luego me fui.




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