Cap 10✔️

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—Gracias. —Dijo cuando me acerque a ver como estaba su pierna.

—Lo siento tendré que cortar tus jeans.

—Es lo más salvaje qué he escuchado. —Reímos.

—Deja de estar de sucio, solo curare tu herida.

—Bien.

—Mientras tú comienzas a contarme todo lo que esta pasando.

—Prefiero decirte cuando hayas acabado, no quiero que me lastimes más la pierna.

—Bueno. —El silencio se apoderó de nosotros, limpie y vende su herida, no parecía una cortada profunda pero era un poco grande.

—Gracias, otra vez.

—He acabado, te escucho.

—Promete qué no te vas a enojar y me escucharás, hasta que acabe de contarte todo, y luego tomaras una decisión.

—Bueno lo prometo.

—Verás los chicos que me hicieron esta herida, son los mismos que me perseguían la vez pasada porque...ellos conseguían drogas para mis amigos bueno yo no las consumía pero nos turnabamos para pagarles, así que cuando a mi me toco yo no tenia dinero y hay una chica que paga por que se acuesten con ella, no había otra solución, ella con dos ocasiones me sacaría de las deudas... —Mi mente no podía con tanta información. —Esto ocurrió mientras estábamos juntos y antes de la deuda también lo hacía, perdón por eso...

—¡Ethan qué mierda estas diciendo! —Grité.

—Prometiste que al final hablarías.

—Tú prometiste que íbamos a estar bien.

—Entonces conseguí el dinero, pero ellos cobraron intereses, aquella noche qué llegue aquí escapando de ellos fue porque no quise pagar dichos intereses y me estuvieron cazando, aquí esta el resultado, y si te preguntas que hacía solo en la avenida 6 en la noche es porque venía de la casa de Rebecca y está vez no fue por dinero, necesitaba distraerme. —Le solté una cachetada.

—¡Eres un cínico, infiel y patán! —Fue lo único que pude decir antes de llorar.

—Lo que te diré ahora sonara aún más patán, esperaba a que tu y yo tuviésemos sexo y entonces dejaría a Rebecca y créeme la deje, luego qué pasó lo nuestro deje de involucrarme con ella, ella no es nada comparada contigo además quién sabe que tantas infecciones tenga.

—¡Ethan lárgate!

—Y para que no se distorsione la información tu querido amigo, compañero, nuevo novio lo que sea, él me vio a mi y a Rebecca en la escuela ese día estaba hablando con ella, pero él escucho cosas que no eran y piensa que te sigo engañando pero no es cierto.

—¡Claro que me engañaste, lo hiciste esta noche!

—No cariño, tú y yo esta noche no somos nada, tú prácticamente me terminaste, aquí estoy contándote todo, porque quiero arreglar las cosas Lia, yo de verdad te amo.

—Por favor ve con tú estúpido cuento a otro lugar. Dime una cosa porque la puta de Rebecca no fue por ti, porque me llamaste a mi.

—Tenias que saber la verdad y esto era lo único.

—Pues que poco hombre eres qué no tienes las agallas suficientes para plantarte frente a mi y decirlo.

—Lia, por favor.

—Vete.

—No tengo pantalones.

—Te quedaras en el suelo, no somos nada recuerdas.

—¿Entonces no somos novios?

—Lo acabas de decir, no somos nada y veo difícil a que volvamos a serlo.

—Esta vez lucharé por ti, y perdón si todo lo dije seco y tan de repente, pero no se como hablar.

—No importa ahora largo de mí cama. —Se bajo al suelo.

—No hay ni una manta, ni almohada, compadecete de este incapacitado. —Le avente una almohada y una manta.

Realmente estoy enojada con él es una maldito qué solo piensa en si mismo y no le importa afectar los sentimientos de los demás.
Me quede dormida sollozando, hasta que mi celular sonó y genial ya era otro día.

—Hola nena. —Ethan apareció a mi lado.

—Al parecer te encuentras mejor ahora veré, eres la última persona a la que quiero ver en mi vida.

—Nena perdón, no era mi intención era la opción más fácil que tenia.

—Pudiste haberme contado, yo te habría prestado dinero, hubiésemos salido juntos de todo. Por eso era tu novia.

—¿Ósea que ya no somos nada?

—Ayer mismo tú lo dijiste, ya no somos nada, y no deberías estar aquí, así que vete.

—Lia, perdón.

—Ya no confío en ti ni un poco, acabaste con todo, me engañaste.

—Lo sé, entiende que estaba desesperado.

—¿Lo disfrutaste?

—¡¿Qué?!

—Mírame a los ojos y responde.

—No. —Bajo la mirada.

—Es obvio que estas mintiendo.

—Bueno si, ¿feliz?

—Vale. Me voy a la ducha, tengo cosas que pensar.

—Pero no tanto contigo, Lia con ella ni pase la noche, no le dije te quiero, contigo fue otra cosa.

—No quieras remediarlo Ethan, vete por favor.

Me metí a la ducha y para cuando salí ya no estaba, dejó una nota.

"Por favor perdoname y ven al árbol de siempre en el descanso."
—Ethan.



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