Una Segunda Oportunidad

Volved Al Pasado: Parte II

—He venido a darte una segunda oportunidad, Señor Stark...

—Eres tú, el mayordomo de Strange.

—¡No soy su mayordomo!— dice indignado —mi nombre es Wong y yo soy quién ahora protege al Sanctum Sanctorum y sus secretos.

—¿Y qué haces aquí?— pregunto confundido.

—Como ya te he dicho vine para darte una segunda oportunidad...

—No te entiendo— lo interrumpo aún más confundido por su presencia.

—Antes de que Thanos acabará con la mitad de la vida en el universo, Stephen se comunicó conmigo, fue entonces cuando me encomendó una misión y a ti también— dice serio.

—¿Una misión?, creo que estás confundido, porque a lo mucho él me dijo que teníamos una posibilidad de ganar entre más de 14 millones de posibles futuros en los que perdíamos, eso fue todo, jamás dijo como ganaríamos, luego Thanos pasó... y bueno, el resto es historia— le explico.

—Mmm... ya veo, ya entiendo que pasó— dice mirándome fijamente.

—¿Y qué podría ser?— pregunto intrigado. 

—Stephen bloqueó ese recuerdo de tu memoria, hasta el momento que fuera propicio para recuperarlo...

—Entonces... ¿qué se hace ahora?— cada vez entiendo menos.

—Esto— dice acercándose a mi.

Su mano empieza a brillar del mismo color anaranjado brillante que de los bordes de los portales que generaron en la llegada de la Orden Oscura a Nueva York, entonces la posa sobre mi frente, todo empieza a brillar, se escuchan voces a lo lejos y luego todo oscurece de repente.

(BB+TS)

(Flashback)

—¿Entonces eso es todo?— pregunto mientras me acerco hacia donde Strange está sentado y levitando mientras medita plácidamente.

Me recuerda tanto a cuando Bruce se pasaba las tardes meditando en el techo de la Torre, diciendo que ahí el aire y la luz es mejor...

Siempre le llevaba una taza de su té favorito, a veces lo acompaña a meditar, aunque siempre me quejaba de lo inútil que era eso, aún así Bruce nunca me echo de ahí, solo se reía de mis absurdos comentarios...

Cuanto lo extraño...

Pero ahora no es momento de eso, debo enfocarme en averiguar a que se refiere Strange con eso de los posibles futuros. 

—Pues por el momento no tenemos más opción que esperar— dice sin abrir los ojos.

—¡Fantástico!— digo con sarcasmo.

—No te enojes Stark, trata de calmarte.

—¡¿Cómo quieres que me calme?!— grito llamando la atención de todos —¡hay un loco psicópata con complejo de mesías que amenaza la vida del universo! ¡y dices que debo calmarme!

—Exactamente, dime... ¿de qué te sirve enojarte y refunfuñar por lo que no puedas arreglar?—  dice con una calma que me enfurece aún más.

—¡¿Y a ti de que te sirve tanto meditar si fracasaste en el único trabajo que tenías?!— lo miro con odio— debías de proteger la gema del tiempo, pero en cambio se la entregaste en bandeja de plata a Thanos...