Aunque Parezca Imposible (TEYP Libro 3)

Capitulo 3

POV AZUL...

-¿creíste que te escaparías?

-¡¡te odio maldito imbécil!!- hable entre lagrimas, había despertado otra vez en aquella habitación, había sentido la gloria al volver a ver a Paolo y creer que nos iríamos de ahí pero esa gloria se esfumó cuando tomo la estúpida decisión de enfrentarse a Bakri, si en lugar de hacerlo hubiera subido al auto quizá la historia fuera otra. No sabia como estaba  probablemente no me enteraría en un buen tiempo,  el simple hecho de imaginarlo solo y herido me mataba, me mataba por completo, quería huir, quería ir con él, estar a su lado, pero era imposible, la diferencia ahora era que afuera no habían dos sino cuatro guardaespaldas, en adelante habrían dos mujeres dentro de la habitación, esto seria un trauma total, de alguna u otra forma tendría que salir, tendría que ser mucho mas inteligente que ese idiota para así lograr escapar

-duerme, esta sera tu vida por un largo tiempo, o quien sabe, quizá para siempre, todo dependerá de cuando vea o no mi dinero 

¨perfecto, esta es mi oportunidad¨

-¿cuanto dinero es?, dime y te lo doy todo y así me largo con mi marido y tu con tus millones 

-no es tan fácil hermosa, yo no aceptare dinero de nadie mas que de Albanessi, así que ni pienses que dejare que me pagues tu, quien debe hacerlo es él- salió   

-¡¡imbécil!!

Bien, así que no aceptaría dinero de mi parte, entonces tendría que planear algo mucho mas elaborado y a lo que él no se pudiera negar, algo que lo hiciera caer sin que lo supiera, debía pensar bien mi estrategia, el problema era que lo único que se me ocurría me llenaba de asco, era la forma mas certera de lograrlo, pero debía ser cosa de días, no podía presentarle un cambio de la noche a la mañana pues seria muy evidente, aunque esto me provocara serios problemas con Paolo, todo seria solo para deshacernos de ese estúpido idiota 

¨pues si, tendré que rebajarme a actuar como una perra si quiero salir de aquí¨

Al día siguiente empezó todo, claro, no tan evidente pues no podía permitirme ningún error, me daba asco pero era la mejor solución posible. Bakri apareció, las mujeres salieron y nos quedamos solos, como era de esperarse no lo mire nada bien 

-¿aun estas molesta?

-¡¿y como quieres que este?!, ¡¡le disparaste a mi esposo y yo no pude hacer nada por él!!,                   ¡¿acaso quieres que me ponga a saltar de la felicidad?!

-veo que aun lo estas, pero bien, no me queda mas que forzar las cosas- sin previo aviso me beso...¡me beso!, quise separarme pero no pude, me agarro fuertemente y no pude hacerlo

¨este es un buen momento para apresurar las cosas¨

Lo intente alejar por un momento pero al ver que no podría por mas que lo deseara pues decidí seguirle el juego, fue un momento que aunque asqueroso, me serviría de mucho, deje de forzar y cedí, no podía evitar pensar en Paolo, en cuan decepcionado estaría de verme así 

¨esto no es lo tuyo Azul, tu no eres una mujerzuela, deja de ceder y aléjalo¨

Como quería hacerle caso a mi conciencia pero no podía permitirlo, quería dejarlo pero debía solucionarlo todo de una vez 

-hmmm, veo que al final lo disfrutaste 

-imbécil..- me limpie los labios

-así iras cayendo Azul, así iras cayendo- salio de la habitación y las mujeres volvieron a entrar, estaban de pie frente a mi cama, ¡que fastidio!, al menos ya no estaba atada pero no podía ni moverme 

Así pase toda la tarde, me llevaron la comida y comí, no hacia nada mas que estar ahí sentada en la cama viendo a la dos tipas que ni siquiera parpadeaban, estaba realmente aburrida, no tenia ni la mas mínima diversión, solo pensar y recordar, era todo y lo único que podía hacer. En la noche Bakri volvió y al fin se fueron las mujeres

-hola hermosa- no respondí, solo lo mire con odio, mucho, mucho odio - escucha Azul, quiero hacerte esto mas fácil, quiero que esto sea mejor para ambos aunque el problema es que tu no colaboras y así no llegaremos a ningún lado

-¿y puedo saber donde demonios pretendes llegar?

-a mi dinero pero sobre todo a ti

-pues el dinero ya te lo ofrecí pero yo jamas seré tuya

-sabes algo, no me gusta tomar las cosas a la fuerza...

-aja...¿enserio piensas que creeré eso?, ¡mírame!, estoy aquí a la fuerza

-bueno, tal vez un poco pero a lo que me refiero es que yo no me comportaré contigo como este...¿cual era su nombre?... Marco, Marco D'Amico, ¿así era verdad?

-¡desgraciado!, ¿tu como sabes eso?

-digamos que este día lo dediqué a investigar y conocer todo de ti Azul, se mucho mas de lo que crees, pero no te preocupes, no pretendo abusarte, yo haré que seas tu quien se entregue a mi sin que yo deba forzarte hermosa

-sigue soñando, eso jamas pasará 

-pues la forma en la que al final correspondiste a mi beso me dijo lo contrario

-¡idiota!

-tengo la razón, mas pronto de lo que crees lograre que te quedes profundamente dormida en mis brazos

-¡¡me das asco!!

-no lo creo, por otro lado, ¿has estado aburrida?

-¿aburrida?- reí sarcástica y continué de la misma forma- no, pero ¿como podría aburrirme?, estoy encerrada en esta sofocante habitación sin nada que hacer y con dos mujeres que desde que se paran frente a mi no dejan de observarme y controlar cada uno de mis movimientos, ¿como podría aburrirme?

-entiendo...¿que quieres hacer?

-¿la verdad?

-claro, pídeme lo que quieras, te juro que te complazco

-bien, pues quiero eh...¨dormir¨, tu me entiendes, ¨dormir¨con Paolo ¡¡¡que es el único que me importa e interesa en este maldito mundo!!!

-¡¡escúchame bien Azul, yo trato de hacerte sentir bien, de darte lo que sea y me sales con esta estupidez!!

-¡¡me pediste la verdad y yo te dije la verdad!!

-¡¡pues esa no es la verdad que yo quiero escuchar!!, no se, pídeme un libro, un instrumento, algo material pero no me pidas a ese imbécil... ¡¡que lo único que puedo hacer es traerlo para que lo veas morir!!

-¡¡malnacido, no te pienso permitir que le hagas nada!!

-tu aquí llorando por él, si tanto le importaras no seria tan imbécil, date cuenta de una vez estúpida, para ese millonario solo eres un trofeo presumible en sociedad, un viejo que tiene la fortuna de tener a tan bella y joven mujer a su lado, tu aquí rogando piedad para él y si tanto le importaras al menos hubiera tenido la decencia de irse contigo cuando pudo- salió...