Día 3 Golpe

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-¡¡MAMÁAAAA!!- Yuya, en el más absoluto pánico, entró corriendo a la cocina para luego abrazarse a la cintura de su "madre" -tienes que detenerlo, por favor-

Yuto, sorprendido hasta la médula por la tan dramática entrada de su princesa a sus dominios, solo parpadeó antes de dejar la manga pastelera a un lado, su hijito casi arruinaba el decorado del pastel que había estado haciendo.

Escuchó los lloriqueos del chico antes de alejarlo suavemente de él y preguntar con calma -¿qué suce...?- su pregunta se cortó cuando vio el serio moretón en el ojo de su hijo ¿pero qué en el infierno había sucedido?

-Mami yo...- ignorando el inicio de la explicación de Yuya, Yuto tomó a su hijo y lo arrastró a la nevera de donde sacó una bolsa de vegetales congelados y se la puso en la cara -¡¡auch!! ¡¡eso duele!!- se quejó el chico de ojos carmesí tomando la bolsa, estaba muy fría.

-Bien, te lo mereces por dejar que alguien te marcara la cara- contestó Yuto poniendo sus manos en su cintura mientras el enfado se mostraba en su rostro -¿y bien? ¿quién fue el desgraciado?- claro, su madre estaba enojado con él por no haberse protegido lo suficiente pero también estaba enojado con el responsable... ¡¡PERO ESO NO ERA LO IMPORTANTE!!

-Mami, tienes que detener a papá- suplicó tomando a Yuto del delantal.

Yuto frunció el ceño -no me cambies el tema- contestó antes de que su ceño se frunciera aún más -un momento ¿qué tiene que ver tu padre con todo esto?-

-Eso es de lo que te quería hablar mami, él lo vio- dijo Yuya refiriéndose al moretón.

El rostro de Yuto se oscureció -¿y porque no empezaste por ahí desde un inicio?- gritó antes de salir corriendo de la cocina seguido por Yuya -¿y bien? ¿quién es el difunto?- preguntó obviando el hecho de que quien tocara a la princesa de Jotaro estaba más que muerto.

-Josuke... y Giorno- contestó Yuya al borde del llanto.

Oh mierda.

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-S-se lo juro, Jotaro-san... fue un accidente- Josuke parecía a punto de llorar mientras retrocedía, detrás suyo se encontraba su otra pareja Giorno quien parecía mucho más calmado que él mismo a pesar de lo oscura que era la expresión del suegro de ambos.

-Se los advertí a ambos, si ponían una sola mano sobre mi princesa- dijo Jotaro dando un paso adelante, detrás de él, Star Platinum parecía listo para golpearlos hasta convertirlos en una pulpa sangrienta.

-P-pero Jotaro-san, técnicamente, no fuimos nosotros- contestó Josuke.

-Fue tu culpa, de hecho fue más culpa mía, pero debemos asumirlo ambos porque somos sus parejas- dijo Giorno pareciendo totalmente indiferente al hecho de que estaba cavando más profundo el hoyo en el que estaban.

-Ustedes...- el gruñido de Jotaro hizo que Josuke sintiera el frío recorriendo su columna, era momento de empezar a decir sus oraciones.

Sin embargo, antes de que Star Platinum empezara con sus ejecuciones la puerta se abrió de golpe y Yuto entró, Josuke casi llora de alivio.

-¡Jotaro no!- gritó el joven de ojos grises antes de acercarse a su marido.

-No vas a detenerme ahora Yuto- Jotaro amaba con todo su corazón a su esposo, pero no dejaría que eso influyera en su decisión de hacer pagar a sus yernos por el daño a su princesita.

-Amor, recuerda que si los lastimas Yuya se pondrá muy triste- dijo Yuto colocando su pequeña mano en el brazo de su marido.

-Lo superará- gruñó Jotaro.

Gotta be somebodyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora