Narra Alex
Después de haberme chocado con esa maleducada, pero bella chica me dirijo hacia el despacho del "jefe" o "chulo" de ¿ellas? No sé realmente como debería llamar a ese delincuente.
Llevo años trabajando de policía y aún así me siento nervioso cuando me tengo que infiltrar y fingir que soy una persona que no soy, podría haber estudiado para actor.
Toco la puerta.
La abro.
-¿Se puede? -pregunto con un tono amable.
-¿Eres...?
-Soy Alex, ayer le llame ya que me interesaba el puesto de Stripper,y habíamos quedado a ésta hora.
-Ah si claro, siéntate-dice de mala gana- bien, eh ¿tienes experiencia como stripper?
-Claro, llevaba años trabajando en un antiguo local pero debido a falta de ingresos lo tuvieron que cerrar- sí, sirvo de actor- por eso buscaba la oportunidad de trabajar aquí.
-La verdad que nosotros no solemos "anunciar", ni confiar en gente desconocida para nuestros puestos, pero ya que vienes de parte de un buen amigo al que confío te daré una prueba de 15 días legales.
-Oh eso sería genial. -una duda rondó por mi cabeza- perdone pero ¿viviré aquí? ¿En este edificio?
-Aquí es donde viven nuestras "meretrices", "mujeres de compañia" o como las llamo, mis putas -que asco de ser- los demás trabajadores viven en sus propios hogares.
-¿No podría quedarme aquí por unos días? -el señor me miro curioso, ojalá no piense mal- es que yo trabajaba en otro sitio que está como a 4 horas de aquí y como acabo de llegar no he tenido tiempo para buscarme una casa, ni tampoco tengo el dinero.
-Bien, solo por el primer mes, que es cuándo te pagaré.
-Muchas gracias señor, no le defraudaré. ambos nos paramos para darnos la mano
-Eso espero, estoy confiando en ti, y si me traicionas simplemente dejas de existir.
Esto me da mucho miedo.
-Descuide, no lo haré -sonríe Alex que no te intimide- ¿cuándo empiezo?
-Mañana, hoy entrenaras en la sala de ensayo junto a algunos de tus compañeros que te enseñaran algunos movimientos que nos hacen distinguir de los otros sitios.
-De acuerdo, gracias de nuevo.
Estaba por salir cuando.
-Estaba esperando a que me preguntarás cuánto cobrarias.
Me detuve de golpe
Eso es lo más importante idiota.
-Le iba a preguntar pero... pero no queria estresarle ni que pensara que vengo por el dinero, que también porque si no no podría vivir, si no porque me encanta mi trabajo.
Me mira sorprendido.
-Vaya, no creía que te gustaria estar en pelotas delante de viejas cuarentonas -dice.
-Bueno, no importa para quien lo haga mientras me guste, me apasiona.
-Bien -aclara su garganta- sin ir del tema,por cada sesión cobrarias 50 euros, pero ya que te vas a quedar todo este mes aquí te descontaré una parte, lo cual será 30 euros por sesión.
Puto rata.
-Claro, me parece muy correcto y aceptable -sonrisa más falsa que cuando deje a mi novia porque "era yo no ella".
-Genial, adiós. -dice cortante.
-Adiós jefe -digo mientras salgo por la puerta.
Bien, ahora tengo que ir a la sala de ensayo, practicar lo que sueles hacer con una chica en la cama pero sin chica y sin cama con viejas cuarentonas...
Dios, este trabajo es difícil.
-¿Dónde carajos está la sala esa de ensayo?-murmuro
Llevo como 15 minutos dando vueltas y vueltas y no la encontraba
"SALA DE ENSAYO"
¡Bingo!
Toco la puerta.
Paso.
Veo como 10 chicos cachas, todo testosterona y esteroides, casi desnudos,mirandome con una cara de asco.
Empezamos bien.
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EL STRIPER Y LA PROSTITUTA
RandomSara, una extranjera que en busca de trabajo en un pais desarrollado, el destino le hace una mala jugada y acaba siendo prostituta obligada y amenazada por su chulo. Alex, un policía en incógnito que se mete en ese mundo para pillar a los "chulos"...