“Cuatro desconocidos, y sus cuatro elementos, Aire, Fuego, Tierra y Agua, tendrán que convivir para encontrar a la quinta persona que une el poder. Cuando todos los elementos estén juntos, la oscuridad se acechará y la luz disminuirá. Solo estas cinco personas, podrán salvar el mundo. Comienza la aventura.”
Ese libro que encontré limpiando el jardín de Nico, mi mejor amigo, enterrado al lado de aquel árbol tan viejo, me dejo sin habla, yo no era una persona que leyera mucho la verdad, pero tampoco repudiaba leer, le pregunte a la Sra. Viard si podía llevarme el libro a casa y dijo que no entendía de donde lo había sacado así que finalmente, el libro se vino conmigo a mi encantadora morada.
Mis padres no existen, bueno si, tuvieron que existir, pero me abandonaron hace mucho tiempo supongo que al nacer, vivo con un anciano que me dio su apellido y me enseño cosas inimaginables de la naturaleza, él es jardinero, y nunca tuvo a una mujer para tener hijos y que cuando llegue en una cesta con el nombre de Jack, me acogió, y vio como crecía envuelto de su mundo de plantas, y acabé enganchándome a ello, en verdad, me gusta mucho la naturaleza.
Estaba en mi habitación y volví a leer aquella portada, era impresionante, me incitaba a leerlo y así lo hice, encontrándome con la sorpresa de que había un bolígrafo, ¿Para qué quería yo un bolígrafo? De igual manera lo cogí y lo abrí, un destello de luz salió de él transformándolo en una espada, pero, ¿Esto era real? Me pellizque en el brazo como dicen en las películas, pero no, esto era real. Intente cerrar el libro pero en cambio, se abrió por la segunda página: “Jack Trinish”.
Una nueva aventura te espera.
