La llegada de la hija de Lucifer (Creepypastas y tú)

Capítulo 09: Siempre pasmadeishon, nunca impasmadeishon.

ᕦ( ͡° ͜ʖ ͡°)ᕤ En el capítulo anterior ᕦ( ͡° ͜ʖ ͡°)ᕤ

-¿Por qué hiciste eso retrasada? -Dijo Jeff adolorido, tocándose la cabeza.

-Pues porque te lo merecías -crucé mis brazos sobre mi pecho, levantándolo más-, agradece que no usé mis poderes contigo, enfermo.

-¡Pero éste enfermo te come toda bombón! -Exclamó mirando mis pechos.

Jane le pegó en la cabeza-¡Hombre, reacciona! ¡Piensa con la cabeza y no con la de abajo de una vez por todas!

-Envidiosa.

-¿Qué dijiste? -Agarró una sartén acercándose a él lentamente.

-Q-Que eres hermosa -ella se sonrojó, pero terminó pegándolo con unos "suaves" sartenazos. Aww, qué romántico.

«¿Viven peleando?».

"Casi siempre".

«Ah. Oye, ¿cuándo volverás sobrina? te extraño».

"Pronto".

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—_______, ven aquí, ya —una voz profunda y temerosa me hizo volver la razón, así que fui hacia donde él estaba.

—¿Sí, Slender?

—Ven a mi laboratorio, debo hacerte algunos análisis de ADN, para estar seguro de algo —carraspeó nervioso, estrujándose las manos todo el tiempo.

«¿Era solo eso? Aburrido».

Alcé una ceja-—. ¿Pasó algo?

Negó-—. Nada de lo que debas preocuparte —contestó serio y dicho esto se fue.

«¿Qué ha pasao?».

(...)

-—Y bien, ¿no me harás el famoso análisis de ADN?

—¡Vaya! y yo pensando que querías saber más acerca de tus padr..

—¡Sí, sí quiero!

Sonrió malicioso mostrando su boca y su larga lengua filosa.

«Esto no me gusta nada».

—Así que al final se dignó a venir — sentí un escalofrío recorrer mi espina dorsal, era una presencia con un aura aterradora. Pero se me hace familiar.

«¡Carajo! ¿Por qué cada vez que lo veo no recuerdo quién es?»

—Señor, no pensé que vendría —frotó sus manos nervioso.

Aquel hombre posó su mano sobre mi hombro y la aparté rápidamente ante todo ese fuego y calor que emanaba—. Calla Slenderman —el nombrado se quedó callado y aquel hombre me miró a mi—, y tú ¿cómo has estado todo éste tiempo sin mí, pequeña?

«Espero que no esté hablando en sentido literal, y si es así le tiro lo primero que encuentre en su bonita cara».

—Discúlpeme por mi mala educación al hablarle así, pero no estaré contando cosas personales a alguien que no conozco.

—Oh, ¿en serio no me conoces? —sonrió.

—No.

—Bueno, pronto empezaras a recordar querida, y te arrepentirás de haberme tratado de tal forma.

Lo miré fijamente a los ojos, alzando mi mentón ya que estaba sentada. Él parecía un humano.

«¿Tanto solo para esto? Qué idiotez».