Capítulo 16.

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(editado).

        11 meses atrás, mes de Diciembre 2014.

        Termino de preparar la mesa del comedor, pongo en los platos mi famoso espagueti blanco con hierbas finas y carne asada con mucho limón. Sirvo en unas copas mi vino favorito; Lambrusco. Me encanta ese vino y es el preferido de Fani. Hay un florero con rosas naranjas, uno de sus colores favoritos por Harry.

        Preparé esto para el regreso de Fani a la casa, después de un buen tiempo al estar separadas, cosa que no me agradó, pero creo que era lo que ambas necesitábamos, creo. Miro a Ed que está desparramado en el sofá viendo una película ridícula, sonrío ante esa visión, cuando de pronto el timbre de la casa suena estruendosamente en mis oídos. Brinco sorprendida y sacudo mis manos en el aire, me acerco a la puerta y la abro.

        —Hola —digo echa un manojo de nervios.

        —Hola —escucho la voz de Fani, está feliz pero hay algo que la tiene realmente estresada o mal, lo sé por su postura, está encorvada.

        —Me alegra mucho que estés de vuelta, Fani. Anda, pasa. Te tengo una sorpresa —digo abrazándola y hago que pase dentro de la casa.

        Ed ya no está en el sofá, de hecho, no lo veo por ningún lado. Bueno, no importa. Dirijo los pasos de Fani hacia el comedor, donde la comida que hice por su regreso aún está humeante. La miro y ésta sonríe feliz, me mira y me abraza, estrechándome fuertemente entre sus brazos, empieza a temblar un poco y las lágrimas mojan mi blusa.

        —Ven, vamos a sentarnos y me cuentas qué tienes —digo yo y ella asiente casi imperceptible. Lo bueno es que la conozco bien…

        —Harry me dijo que necesita un tiempo… Que va a viajar a Escocia, se va a quedar ahí hasta navidad y para esas fechas regresará. Pero a penas pasen las fechas festivas el va a regresar. Me dijo que tiene que pensar muchas cosas —suelta la lengua una vez que está sentada. Se detiene y refriega sus ojos—, pero él no se puede ir… no se puede ir, no me puede dejar sola y más cuando estoy embarazada.

          —¿Qué? —musito y la miro impactada.

        —Mi comportamiento tan bipolar esas dos semanas que pasé lejos de ti fue porque no te tenía cerca y porque estaba embarazada —dice Fani aún llorando.

        Me levanto de mi asiento y mientras me acerco a ella, ruego a Dios que la comida siga estando caliente y que la carne no se haya convertido en suela de zapato. Me acerco a su anatomía y la abrazo, en éste procuro con toda mi alma darle algo de apoyo emocional, espero haberlo logrado.

        ~

        —Oye Deyna… Debería tatuarme la piel con tu nombre —dice Ed después de un rato en silencio. Fani está en su habitación. La comida le gustó y está feliz de haber regresado.

        —Estás diciendo tonterías Ed… —digo entre risas y un color rojo carmesí pinta mis mejillas. Diablos, parezco un pariente de una manzana o de un tomate.

        —Entra al baño —dice él mirándome con ternura, ¿qué?—, ya te he preparado un baño caliente y lo he llenado de burbujas —dice él sonriente. Lo miro y lo imito.

        —Te tomas muy en serio tus canciones —digo y me levanto, me despojo de mi ropa y me doy cuenta de lo blanca que es mi piel

        —Y tal vez tú eres mi copo de nieve —murmura recorriendo mi cuerpo de arriba abajo con su mirada. Me sonrojo aún más, me acerco a la cama y tomo un cojín y se lo aviento.

Falling and failing for you. {Ed Sheeran}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora