Enmedio de mi furia, salí y corrí a buscarte.
Estabas sentado en el piso de tu habitación al momento que abrí de golpe la puerta.
Me viste asustado, estabas confundido.Sin explicaciones me lancé por ti.
Te levanté y te azoté en la pared.No sé qué estoy haciendo. Fue un impulso que surgió cuando estaba acostado en la oscuridad de mi cuarto, viniste a mi mente y me enojé.
Ya no quiero sentirme así, detente.
Déjame en paz.