Los ruidos obsenos en toda la habitación aumentaban.
Tus fuertes agarres, me pedían que continuara.
Y no podía negarme.
En ése momento, entendimos varias cosas, entre ellas, los sentimientos acumulados.
Vaya forma que tenemos para entendernos.
Los ruidos obsenos en toda la habitación aumentaban.
Tus fuertes agarres, me pedían que continuara.
Y no podía negarme.
En ése momento, entendimos varias cosas, entre ellas, los sentimientos acumulados.
Vaya forma que tenemos para entendernos.