Soulmate | Cashton.

LUCENT

- ¿Y si me niego? - Ashton se cruzó de brazos.

-Entonces me quedo aquí, podría intentar fastidiarte un poco.

Ashton relajó sus músculos, era consiente de cómo se veía: con ojeras y cabello enmarañado. Pero no le importó, porque había solo una cosa que deseó tanto; y era que Calum lo viera de la misma forma que él algún día lo vio y lo seguiría viendo.

-Muy bien, vamos- Ashton estuvo a punto de dirigirse a la puerta de su habitación, pero Calum negó-. ¿Qué sucede?

- ¿Recuerdas aquel día que querías ser arriesgado, cometer una locura y escaparnos de nuestros padres sin que se enteren?

-Dijiste que no sería ese día.

-Bueno, Ashton, finalmente ha llegado tu oportunidad. - Calum salió por la ventana, Ashton no tenía idea de cómo sentirse, incluso el mismo Calum no lo sabía.

Salió detrás de Calum y extrañamente comenzaron a correr, sin seguir dirección alguna o sin fijarse si algún carro se cruzaba en sus caminos.

Calum se detuvo después unas cuantas calles, recuperando el aliento.

- ¿Por qué? - Ashton preguntó, respirando aun irregularmente.

- No lo sé.

Ashton sonrió una vez que estaba recuperado.

-Bueno, estoy listo para que me sorprendas.

- ¿Y el odio a las sorpresas?

-Tú estás haciendo un esfuerzo, estas sonriendo, te has atrevido a ser rebelde, ¿por qué yo no puedo hacer lo mismo?

-Seremos espontáneos, aunque eso no se me da mucho- Calum pensó un momento-. No podemos recrear la cita porque sería extraño, pero sé a dónde podemos ir justo a las 12:00am

- ¿Adónde?

-Supongo que has escuchado hablar del lago Michigan.

-Calum, vivía en San Diego, no en China, por supuesto que sí. Además, fue el primer lugar donde mi madre nos llevó para convencer a Harry de que sería mejor que San Diego.

-Eso es perfecto, pero hoy nosotros tendremos una vista mejor- sonrió, parecía un niño pequeño.

-Muy bien, entonces vayamos.

Ashton y Calum caminaron, no a la estación de autobús, sino a la estación de tren que casi nunca usaban, pero Calum sabía que un pequeño viaje en tren serviría para terminar con toda la tensión que aun acumulaba en su cuerpo. Y agradecía que la estación aun estuviera abierta, o sino todo su plan hubiera quedado arruinado, haciéndolo así una peor cita.

- ¿Y bien? - preguntó Ashton.

- ¿Qué?

-¿Cuál es el propósito de tomar el tren?

-Bueno, casi no lo uso, así que estoy siendo arriesgado.

-Estas bromeando, ¿cierto?

-En lo absoluto - Calum sonreía, miraba otros sitios, realmente como si fuera de sus primeras veces estando ahí.

-¿Alguna pista de a dónde vamos?

-Al lago Michigan.

-Eso ya lo has dicho, se más específico. Por favor - Ashton juntó ambas manos, atrayendo la atención de Calum, él lo vio, y resistiéndose a esa mirada, negó.

Permanecieron en silencio pocos minutos, Calum miraba las estaciones, esperando a que el tren llegara a su destino.

- ¿Y qué pasará después de esto? - Ashton le preguntó rompiendo el silencio.