Que hable nuestra piel

Capítulo 28- La proposición

Aitana
28 de diciembre. Madrid.

-Julia ahora no puedo lo siento-le digo a mi secretaria cundo viene a buscarme a mi despacho-
-Señorita Ocaña pero es que hay un chico fuera que está llamando a la jefa de diseñadores a gritos en la sala principal de las galerías
-¿Que?-Por un momento me da miedo. La última vez que pasó algo así era en Los Angeles, Jhon, borracho y con las manos calientes, y las piernas, para pegarme en caunto llegáramos a casa, se me revuelve la tripa de pensarlo y reacciono cuando Julia me pasa la mano por delante de los ojos- Si, voy voy

Me asomo por las escaleras y veo a Luis abajo

-¿Que haces?-digo con una sonrisa inconsciente en la cara-
-Baja baja-grita ilusionado, no se porque-

Bajo y todo el mundo nos mira

-¡Atención señores y señoras! Esta mujer, es la mujer más impresionante que veréis en vuestras vidas. Aitana-dice ahora mirándome a mi con todos los clientes y empleados mirándonos, Julia apoyada en la barandilla de arriba con una sonrisa- Si una cosa tengo clara en esta vida eres tú, eres la única persona de la que me he enamorado hasta un punto de que me dé igual todo lo demás, de lanzarme a la piscina, a veces llena, más bien siempre.
Te quiero muchísimo Aitana, y quiero que seas mi mujer, si quieres claro. -se arrodilla y saca una caja pequeñita de terciopelo rojo de su bolsillo de la chaqueta- Aitana Ocaña, ¿Quieres casarte conmigo?

Me tiemblan las piernas y no puedo tener los ojos más abiertos. Se me ha secado la boca y una sonrisa gigante a aparecido en mis labios desde casi la primera palabra

Lo miro a los ojos, cristalizados, en realidad está nervioso, lo noto

Me tiro encima suyo a abrazarle y todo el mundo aplaude y chilla al grito de "vivan los novios"

Le planto un beso en sus labios y sonríe sobre los míos provocándome la sonrisa a mi también

-No me has contestado
-Claro que quiero casarme contigo idiota

Sonríe aún más y me pone el anillo en el dedo anular de la mano izquierda.

Otros dos besos seguidos aún sin separarnos de nuestro abrazo. Risas tontas y un peso quitado de encima.

Nos levantamos y la gente va volviendo cada uno a lo suyo. Sonrió a Julia y vuelve a su puesto dando saltitos de alegría

Y entonces veo a Aiti apoyada en la pared grabando con el móvil y con una lagrima corriendo por su mejilla

Se acerca a nosotros y nos fundimos en un abrazo a tres. O a cuatro mejor dicho

-¡Aitana! ¡Llaman de Los Ángeles!-me grita Julia desde arriba-
-Jo, lo siento chicos pero tengo un montón de trabajo para poder tener fiesta del 31 al 7
-No pasa nada, nos vamos a preparar la comida
-En una hora estoy en casa

Le doy un beso a Luis y otro a Aiti en la mejilla y subo corriendo para coger la llamada

Cepeda
Raviolis de queso, pasteurizado por supuesto, y de postre hemos hecho brownie de nutella
Desde que Aitana está embarazada lo miro todo, quedo pasteurizado, nada de carne cruda...

A las 2 y media escucho el ascensor y las llaves en la puerta

La veo entrar con mala cara, demasiado seria. Tira el bolso y la chaqueta en la entrada y se acerca a darme un abrazo.

-Ey, ¿todo bien?
-No, tengo que irme a Los Ángeles 15 días en enero
-Joder, no pasa nada Aiti, son 15 días, pasan enseguida
-No quiero irme, no quiero volver allí
-Miraré si puedo cogerme vacaciones para ir contigo
-Jo Luis es que...
-Te entiendo, no hace falta que me expliques nada, es normal, no son buenos recuerdos, pero siempre se pueden crear nuevos ¿no?
-Supongo
-Venga futura señora Cepeda, vamos a comer
-Que mal suena eso Luis
-Que es broma tonta

Un largo beso en los labios, lento, disfrutándonos

Aitana
Mientras Luis friega los cacharros y Aiti se echa la siesta en el sofá me siento con una mantita y me miro la mano. El anillo es precioso, un pequeño diamante, sencillo y precioso.
No me puedo creer como ha cambiado todo.
Hace un año me dicen esto y aún me estaría riendo.
Parece mentira que hayan pasado entre nosotros 16 años, 17 casi. Pero es que cundo hay amor, nunca acaba. Y lo nuestro no acabo ese 13 de marzo. Justo cuando hacíamos 2 años juntos.
Y ahora estoy en lo que y siento como mi casa, mi hogar. Con una niña maravillosa durmiendo al lado que me trata como si de verdad fuera su madre, o algo así porque lógicamente madre ya tiene, pero no tiene porque haber solo una.
Mi futuro marido en la cocina y mi bebé creciendo y aferrándose a la vida. Aferrándose a mi interior.

-¿Que piensas?-Me pregunta Luis mientras tapa a Aiti-
-En lo feliz que soy-se me quiebra la voz y se sienta a mi lado para abrazarme-
-Demasiado hemos tardado
-¿Cuando nos vamos a casar?
-Mañana
-Que dices idiota
-Es broma. Pero me gustaría que antes de la locura del bebé
-A mi también. La boda de Marta es en septiembre, justo cundo tiene que nacer el pequeñajo o pequeñaja. ¿Que tal la nuestra en junio?
-¿Te dará tiempo al vestido y todo?
-Si. Quiero una boda pequeñita
-Mejor. Familia más allegada y amigos
-Si, nada de invitar por compromiso, eso si, mi madre tiene 11 hermanos
-Ya ya, da igual, sea como sea, va a ser de los mejores días de mi vida, junto al día en el que nazca esta cosita-dice acariciandome la barriga- y el que nació esa cosita-dice mirando a Aiti que duerme profundamente- Bueno y el día que te conocí claro, y el primer polvaco madre mía
-¡Luiiis!
-Chica es verdad
-Te quiero
-Yo más- me roba un beso y yo le robo dos más-

Luis se duerme con la cabeza en mis piernas mientras le toco el pelo.
Y una sonrisa tonta aparece en mi cara al pensar en lo que acaba de decir. En ese día.

Nos conocimos en casa de Roi. Era el novio de una compañera de la Uni, amiguísimo de toda la vida de Luis.
Lo había visto un par de veces en su casa cuando iba a hacer algún trabajo o algo. Lo veía un prepotente y un chulo.
Me invitaron al cumpleaños de Roi.

-Que pasa chula, ¿te aburres?
-No, y pa chulo ya estás tú hijo
-Uy que humos, ¿un chupito?

Tres chupitos de jagger después estábamos en el sofá riéndonos a carcajada limpia. Graciosa sí que es el cabrón, pensé
Y joder no se cuantas veces pensé en las maravillas que podrían hacer esas manos

Noto como se acerca a mi cuello, me da un beso húmedo que hace que se me humedezca otra cosa y se me erice por completo la piel.

Nuestras miradas se cruzan, sólo un momento, para después centrarlas en los labios del otro.
Y entonces se lanza y yo no me aparto, ¿como coño me iba a apartar de Luis Cepeda? Aún con el corazón echo añicos hizo que riera de verdad por primera vez en un mes

-¿Tienes condones? -Susurro en su oído-
-Ven

Me tiende la mano y me lleva a una habitación con una cama, parece la de invitados o algo así, tampcoo me importa en este momento

No tarda en desnudarme y yo a él
Joder. Si vestido es impresionante desnudo...
Esas manos cumplen con creces mis imaginaciones, o incluso más.

Al día siguiente seguíamos por watshapp con nuestro tira y afloja. Echándole la culpa de nuestra valentía al alcohol. Nada más lejos de la realidad.

Fué la primera vez que me dijo lo que le ponían mis gemidos con su nombre. Y no ha parado de repetírmelo desde entonces. Bueno si. Pero ya sabemos por que. 16 años. Como pesan los putos 16 años.

Y así, con una sonrisa y risa tonta al acordarme de esto caigo en los brazos de Morfeo con la cabeza de mi futuro marido en las piernas y los pies fríos de Aiti rozando mi brazo.

Holi!
Por fin he podido escribir! Ale dosis de azúcar!
Quiero saber vuestras teorías.
¿Que creís que va a pasar ahora?
¿Que harán en nochevieja?