Capítulo 20-Pulpo a la gallega

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Cepeda
Son las dos de la mañana y aún no me he dormido. La escucho dale vueltas en la cama. También está despierta.
Me levanto y voy hasta su puerta.
Pero no.
Si ella es cabezona yo más. Ya le pedí perdón ahora que sea ella la que haga algo.
Vuelvo a la cama y por fin me entra sueño.

Me despierto con un lanzamiento de cojín y la alarma de fondo.
Quien va a ser, mi hija cabreada por la mañana.
Voy apañado con estas dos.

Entro al baño a asearme y me visto. Cuando salgo de la habitación Aitana está esperando el la puerta de la de invitados para entrar a arreglarse a la nuestra.
Intento no reírme y voy a la cocina a preparar el desayuno.

Aiti aparece ya vestida y peinada, por su cara mejor no hablarle, aún no ha desayunado y es pronto.

Se sienta a comerse una tostada y un zumo mirando a la nada

-¿Tienes examen no?
-Si, de filosofía
-Jodo, pues suerte cariño
-La necesitaré

Aitana aparece con pantalones ajustados negros, una camisa blanca, tacones negros bastante altos y americana
Veo que coge el bolso y las llaves

-¿No vas a desayunar?
-He quedado para desayunar
-Ah vale, me podrías haber avisado que te había preparado el café

Me ignora y guarda el móvil en el bolso

-Suerte con el examen Aiti
-Gracias, que vaya bien la reunión
-Gracias cariño

Sin ni si quiera mirarme se va

-¿Reunión?
-Creo que era algo importante, va vamos que llegaré tarde

La llevo al instituto y me voy a la oficina
Reunión importante, y ni me lo había dicho, en ocasiones así veo a la Aitana de 19 años

20:00
Llego a casa tras pasar a buscar a Aiti por la academia de inglés y Aitana no está.

-Esta tía de que va
-Igual se le ha alargado la reunión chico

*suena el timbre*
Abro el portero sin mirar quien es y dejo abierta la puerta de arriba, igual el desastre de Aitana no encuentra las llaves

Veo aparecer por la puerta a ese terremoto con rizos y acento gallego
Miriam

Se acerca corriendo a abrazarme y jo la quiero mucho

-Pero Miri que haces aquí
-Pues nada que me apetecía verte y a mi niña
-Esta haciendo deberes creo, ¿te quedas?
-Hombre si me invitas, un par de días solo
-Pue claro que si

Va a ver a Aiti y vuelve a los diez minutos

-Esta muy mayor, y eso que la vi hace unos tres meses, tenéis que veniros más por Galicia
-Pues si

Le cuento que Aitana ha vuelto y bueno, nuestra situación actual

*se oyen las llaves y entra Aitana*

Nos mira confundida y cuelga la chaqueta en el perchero

-A venido Miriam a quedarse unos días
-Ah, vale

Ya noto la tensión y es que no me acordaba de cómo acabaron estas dos hace unos años

-¿Que tal la reunión?
-Bien

No dice nada más y se va hacia nuestra habitación

-Luis si voy a ser un problema me voy a un hotel, de verdad, no sabía que ya vivías juntos
-¿Miriam y no lo podríais arreglar? Vale que fue una discusión fuerte, pero tía, han pasado 17 años y muchas cosas
-Por mi si, a ella no la veo con intenciones, y si estáis peleados ya me contarás que puedes hacer tu
-Hablare con ella esta noche, ahora vamos a comprar pulpo para la cena
-Venga

Que hable nuestra piel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora