Estaba en clase, el profesor estaba dando los dibujos y diciéndonos las notas sacadas.
- ¿Hablaste con Xavier?
- No, ahora lo hago cuando tengamos el descanso.
- Señorita Dafne, tienes un nueve y medio.
Me levanté y fui a por mi dibujo.
- ¿Que hice mal?
- El borrón que tienes en la esquina.
- Lo siento, es que lo había acabado y usted dijo lo de poner el nombre y lo de la clase en la parte de delante así que tuve que tapar parte de mi dibujo.
- Esta bastante bien, vuelva a su asiento, mañana os daré el otro que mande.
Terminando la clase fui en busca de Xavier, el cual estaba en un banco de una pequeña plaza.
- Xavier, hola.
- ¿Que os traé por aquí?
- Necesito tu ayuda.
- Cuéntame.
- ¿Puedes acerté pasar por mi novio?
- Sabes que soy Homosexual ¿Verdad?
- Sí, pero no pareces que lo seas, eres muy masculino.
- Soy hombre y me gusta serlo.
- ¿Entonces?
- Vale, pero solo una semana.
- ¿No vas a preguntarle por que?
- Jack, no soy tonto, le gusta el frutero y es lo típico que hacen las adolescentes, aun que pensaba que ya teníamos una edad y dejamos de serlo.
- Es idea de ella.
- Lo supuse.
Se echó a reír y Jack lo acompañó en su risa.
- Bueno yo tengo que irme ya. -Dijo Jack.
- Que te vaya bien el dentista.
- Gracias loca.
- Bueno tú te viene conmigo a la frutería a comprar una manzana. -Dijo Xavier.
Entramos en la frutería y Xavier cogió un guante transparente y agarro una manzana, se acercó al mostrador y la puso encima.
- ¿Cuanto es?
- 25 céntimos. -Respondió el chico por el que suspiraba.
- Amor¿Que quieres?
A él.
- Nada Xa-Me pare y rectifique, nada de Xavier- Amor, gracias.
- No hay de que muñeca.
Era increíble pero no vi ningún signo de atención hacia a mí, por inercia uno escucha hablar y gira la cabeza. Me agarro Xavier de la cintura y salimos.
- Creó que lo tienes muy complicado.
- No me desanimes anda.
- Bueno quizás si hablamos sobre algo y nos va oyendo, pero ya te digo que tu plan para mí perspectiva hace agua por todos lados.
- Es que no eres creíble.
- ¿No serás tú la poco creíble?
- Yo no, eres tú qué no te metes en el papel.
- Tú eres la que te ha costado milésimas de segundos el saber que me tenias que decir amor y no Xavier, sin olvidar que estabas casi babeando.
Estaba reclamando cuando era yo la que quería conseguir algo de todo esto.
¿Que ganaba él?
- ¿Por que tanto interés de que sea creíble?
- Primero para que tu consiguas a ese y segundo para que un chico de la facultad me deje en paz.
- ¿No eres gay?
- Sí pero no me gusta cualquier tío.
- ¿Y no es malo que crean que te gustan las chicas? -Alce mis cejas.
- Nada que ver, como no hay bisexuales, creo que más que homosexual o incluso heterosexuales.
- Exagerado.
- Un poco, pero no me incómoda, no es la primera vez que estaría con una mujer.
- ¿Cómo?
- Pues hace unos años aun no tenía claro que me gustaba, quizás por que me negaba a ser lo que soy, pero realmente nunca me habéis atraído las mujeres sexualmente.
- ¿Vamos a tomar un café?
- Claro, pero a donde para el acosador.
- Perfecto Xavier.
- Amor, dime amor.
- Vale. -Me eche a reír.
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Enamorada De Quien No Debo
Roman d'amourSoy una chica corriente, cabello a media melena tenido de gris, con unos ojos azules océano. Él es un chico de los que te quedas embobada nada más verlo, de ojos y cabello negros. Pero como siempre tiene que tener algo malo. Derechos de autor reser...