Don't leave me again - Bechloe.

Capítulo 5

Son las seis de la tarde cuando Chloe llega al piso.
Es jueves, lleva cuatro días trabajando para Frederick Lewis, uno de los mayores empresarios de NY dedicado al mundo de la producción musical. Pese a todos esos datos que podían hacer temblar a cualquiera, Chloe no se siente para nada estresada. No siente que tenga que destacar más allá de lo que es, una buena empresaria y, por mucho que Brett se muerda las uñas al ponerse en su lugar, el de mantener contacto directo con el jefe, ella no se deja intimidar - puede que el hecho de conocerlo desde que era una cría ayude -.

Chloe le narra a su mejor amiga como fue su día en FLentertainment y la rubia, que ha llegado antes de lo normal, pregunta ansiosa por "ese tal Bret".

− Bueno todo muy bien siendo la secretaria del jefe, pero a mí lo que me interesa es ese tal Brett del que me hablas muy de vez en cuando - Aubrey le lanza un guiño pícaro a la pelirroja.

− Por Dios Aubrey - Pone los ojos en blanco − Si te hablo tanto de él es porque básicamente es de los pocos que se atreven a hablarme. Los demás parece que les voy a morder o algo. Creen que por ser la secretaria del señor Frederick voy a ser una arpía o yo que sé - la pelirroja resopla indignada.

− Ya, claro... - Sigue su mejor amiga − O porque le pones.

− ¡Aubrey! !Pareces Stacie, tía!

− ¡Venga ya! - Grita divertida. − Como si fuera raro que a un tío le guste Chloe Beale... O a una tía.

− Eso es mentira tss - Niega y entrecruza sus brazos para aparentar seriedad, pero la sonrisa que escapa de sus labios muestra diversión. A casi todo el mundo le gusta que hablen de ellos de esa manera y Chloe no es la excepción.

Las mejores amigas continúan su charla y ambas se preparan algo de picar hasta que llegue Luke y decidan poner una película para descansar de su laborioso trabajo.

La pelirroja vino con la idea de que ese verano trabajando sería horrible pero se llevó una grata sorpresa. Y estaba segura que era gracias a su mejor amiga y al británico.

Pero eso no quita que en el navegador del iPhone de la pelirroja haya marcado como favorito una página de alquiler de pisos para huir de allí y así darle intimidad a los tortolitos.
Por mucho que le gustase estar en compañía de ambos, no podía dejar de sentir que se interponía en su relación, pues gran parte del día lo pasaba Aubrey con ella en vez de con Luke. Quizá sea una tontería, pero en la cabecita de Chloe tenía bastante sentido.

BECA

Último día de su primera semana y la dj siente como si llevara toda su vida metida en ese empleo. Si ya se le hacía duro hacer recados en Residual Heat, en FLentertainment no era diferente, al contrario, era el doble de pesado, más pesado que los abrazos de Amy cuando se tira encima suya y la atrapa en el sofá, cama o suelo - cualquier estructura llana era válida para la australiana -. Podría decir que echa de menos Resiadual Heat y a todos los trabajodes de allí, incluido Dax y su tío/jefe que la llamaba Reggi y cualquier variante que no supusiera el nombre correcto de Beca.

Aunque no lo quiera aceptar, Beca también echa de menos salir del trabajo y llegar a casa de las Bellas, oler el aroma de palomitas que había asociado a Jesse. Verlas a todas hechas una bolita en los sofás frente a la tv mientras veían cualquier película y dependiendo de su género las encontraba riendo, llorando o gritando como locas porque un asesino en serie ha aparecido de golpe en primer plano y les ha dado un susto de muerte. Echa de menos hacer pijamadas únicamente para descubrir más acerca de ellas en cada atrevimiento o verdad y así seguir conociéndose. Echa de menos hacer magia combinando la música y sus voces. Echa de menos ver cómo se picaban las unas a las otras con tal de sacarse unas sonrisas y que más de una acabase con las mejillas sonrojadas - sobretodo por culpa de Stacie o Chloe -.
Chloe... la echa tanto de menos que le duele cada vez que la recuerda, cada vez que alguien pasa a su lado y lleva la misma fragancia a coco que solía llevar ella. O cuando escucha la armonía de una carcajada tan peculiar y parecida a la suya que podría jurar que está en el mismo lugar que Beca.