•Vendida A Él• Libro 1 |+18| (Terminada)

♠Capítulo ocho♠

Hola amores siento no haber publicado ayer se me fue, por fis voten dejen de ignorar eso duele💔.

Bueno dejando el drama, disfruten 😘

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Los gritos no se dejan escuchar por todo el Salón, dirijo mi mirada a toda esta pero no hay salidas, la única puerta ~por donde había entrado junto Adrián anteriormente~ se encuentra cerrada junto a dos hombres bloqueando la para evitar la salida de cualquiera.

El miedo me recorre entera, Adrián tiene una sonrisa de loco.
-Q.. Que dem..monios haces? - mi voz sale entrecortada por el miedo.
Su mirada cae en la mía y su misma pervecion sedienta de sangre y de venganza me ven sin una pizca de remordimiento.
-¿Que es lo que hago? - se pregunta así mismo.
-Solo les dejo claro que conmigo nadie se mete- sus palabras son frías y con una clara amenaza hacia mi y cualquier otro que quiera traicionarlo, los escalofríos encrementan en mi interior.

Se voltea a los invitados que aún no dejan de llorar por piedad, les veo con lastima y agacho mi cabeza, son ellos o soy yo y claro está que soy yo.

-Dejen de gritar, que fastidia- dice con voz fuerte e irritada. Su azul mirada recorre toda la extensión del salón y con una sola mirada les dice algo a sus hombres. Tres de estos agarran a un tipo de unos 30 años aproximadamente, otro de 40 y otro de más de 20 tantos años.

Adrián baja del escenario y se acerca con cautela como un león que acecha a su presa, se pone enfrente de ellos, los otros invitados se quedan en silencio y expectantes por lo que el demonio valla hacer.
-¿Saben cuantas personas han intentado matarme todos estos años? - deja la pregunta al aire y las personas se tensan por sus palabras y ahí todo cobra sentido, ellos trataron de matarlo y les salió mal, muy mal por que él lo sabe y se va a cobrar.

-Muchos... ¿Y adivinen quién lo a logrado? - su mirada recurre el lugar con una seriedad escalofriante.
-Nadie, si no, no estaría aquí queridos colegas- lo último lo dijo con burla, vio a uno de sus hombre, era el que manejaba la camioneta en la que Adrián y yo venimos acá.

-Gracias, Stefan- el hombre le entregó una pistola k47, esas pistolas están prohibidas en el país por su alto calibre, pero para este hombre no hay nada prohibido, después de todo él me compró y eso también es ilegal aquí y en la China.

-Miren ya estoy cansado de esto, saben que me voy a dar cuenta de todo antes de que quieran hacer algo, carajo- su enojo es más que palpable en el ambiente.

Apunta el arma al chico de unos veinte tantos años y este palidece por su pronta muerte, el grito de una mujer sobre sale en el salón, Adrián voltea a ver la mujer que le suplica que no lo mate, que es su único hijo, que tenga piedad.

Sus gritos me aturden de tal manera que sujeto mi cabeza con mis manos apretando mis sienes para acallar el dolor de cabeza que me abraza con fuertes puntadas que me hace soltar unos pequeños sollozos.

Siento una mano en mi cintura y me hace pegar un brinco, volteo mi rostro y veo el rostro de Isaac, serio como desde que lo conocí.
-Ven - me lleva detrás del escenario para ya no ver más lo aterrador que es Adrián Novack.

-¿Que demonios le sucede a ese hombre? -mi respiración es agitada, Isaac me observa con pena, suspira y sacude su cabello con su mano izquierda.
-Él.... Es un mafioso- dice con dificulta como si fuera prohibido hablar de él.
-Eso ya lose, me refiero el por que de tan atroz acto que acaba de cometer en ese salón- digo sería y un ligero temblor en mi voz, estoy aterrada, ese hombre es el diablo en persona.
-Dove... Es complicado- suena frustrado.
-¿Por que me llevaste con él? - le reprocho con dolor.
Suspira y me mira con culpa.
-Era mejor que ese hombre-.
-¿Eso crees?, no acabas de ver como asesino a ese hombre, ¿que pasará conmigo? -mi voz se tiñe de puro horror y mi cuerpo tiembla, mi garganta se cierra y mi respiración empieza a fallar.
-¿Dove? - escucho la voz de Isaac como un eco lejano.

La voz de Isaac, un disparo y más gritos es lo último que escucho.

Y todo se volvió negro.

(...)

Abro los ojos lentamente, joder me duele la cabeza.

Cuando por fin puedo abrirlos sin problemas volteo a ver a mi alrededor, las paredes blancas y las suaves telas color vino que rodean mi cuerpo en una gran cama me hacen recordar que me había desmayado después de ver Adrián acabar la vida de un hombre sin remordimiento, mi cuerpo se estremece al recordarlo.

Bajo de la cama al fin reconociendo la habitación que anteriormente Adrián me había dado. Camino por ella hasta llegar al baño, me sostengo del lavado y enjuague mi rostro y bebo un poco de agua, veo mi rostro en el espejo encima de este y veo el maquillaje corrido y mi piel pálida, cosa que raramente pasa, solo si estoy cansada y sin comer, pero supongo que e pasado por mucho y ese es el mejor aspecto que alguien en mi situación tendría.

Doy un suspiro pesado y me dirijo de nuevo a la habitación y me quedo en el centro de ella viendo a mi alrededor.

Estoy atrapada, tengo miedo y no es para menos el hombre que me compró es un completo monstruo.

Sin querer y sin poder evitarlo, lágrimas saladas caen de mis ojos hacia mis mejillas, camino hasta la cómoda donde hay cremas, perfumes y más cosas para mujer. Agarro un paquete de toallas húmedas para remover el maquilla corrido de mi rostro, me miro en espejo de esta y me aseguró de quitar el rastro del maquillaje.

Una vez término boto la toallita al pequeño basurero cerca de la puerta del baño y me dirijo a la cama en donde me recuesto y me dejó llevar por el cansancio quedando me así dormida.

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Bueno eso fue fuerte, saben esto me cuesta mucho escribirlo,  por que no me quieren dar estrellitas amigos.

Lamento no haber publicado ayer, estube ocupada y se me fue lo siento😔

Espero les allá gustado amores, les iba a dar su maratón pero me ignoraron y eso lastima al pedazo de hielo al que la llaman corazón 💔

Eso es todo amores, bye hasta el miércoles 😘😊

Lulis. Umaña🌹