Zedd y Zadie

Capítulo 2: La gorra perdida

Zedd estaba distraído en clases, fingía leer su cuaderno y tomar apuntes, pero su mente estaba en la pijamada del otro día. Por alguna razón, durante le clase le vino a la memoria el recuerdo de verse a sí mismo frente al espejo usando un vestido y maquillado. Más allá del hecho de que había sentido cierto gusto por eso, en lo que pensaba era "¿Por qué?".

-Al fin o encontraron- Le dijo Guy, refiriéndose a una de sus gorras favoritas, era color rojo con un dibujo de un puño en color dorado -Casi me da un ataque, Zedd. Por un momento creí que lo había perdido para siempre-. Zedd acompaño a Guy a los objetos perdidos a la pequeña sala de objetos perdidos de la escuela. Se percató que entre varias cosas, había una caja descuidada en una esquina -Son las cosas que nunca reclamaron. Llevan más de un año aquí, si quieres algo puedes llevártelo- Fue lo que dijo el encargado del lugar, un sujeto joven de piel clara, bigote de puberto y pelo rubio, a ojo parecía tener unos 19 años. -Si, si, si, muy bien, pero yo lo que quiero es mi gorra, un compañero me dijo que encontraron una gorra roja con un dibujo de puño- Dijo Guy queriendo volver al asunto principal, a lo que el encargado le dijo que de hecho habían varias gorras rojas, que mejor viniera él a ayudarlo a revisar entre las prendas. Mientras Guy y el encargado revisaban las gorras, Zedd había aprovechado la distracción y rápidamente había guardado algo de la caja en su mochila.

Ya de noche, Zedd aprovecho que sus padres ya estaban dormidos, salió de su cama, se quitó su pijama, encendió la lámpara de la mesa de noche, se colocó una playera de manga corta color rojo con bordes negros. De la cintura para abajo solo tenía sus calzoncillos y unas medias, entonces fue a su mochila y sacó lo que había guardado nerviosamente durante el día. Zedd saco una falda color gris claro de su mochila; la subió por su cadera, con un poco de dificultad logró abotonarla por detrás y entonces se quedó unos momentos parados sintiendo como se sentía (Valga la redundancia), usar una prenda femenina otra vez. Ante la luz de la lámpara, la pantalla del televisor fungía como una especie de espejo donde Zedd se pudo ver mejor, la verdad la escena no le disgustaba del todo. Nuevamente surgió en su cabeza la idea de la pijamada, de que le hubiera gustado tener un repertorio más amplio para elegir que ponerse y con que maquillarse -¿Seré homosexual o algo así?- Pensó -No siento atracción por otros chicos más allá de la amistad- Finalmente, se la quitó, se volvió a cambiar de ropa, guardó la falda dentro de la almohada, apago la luz e intentó dormir -¡¿Porque me gusta vestirme de niña?!- Pensó fuertemente, esto ya era una duda que le taladraba la cabeza.

-Zedd, amor, tu papá y yo vamos a salir esta noche a una fiesta, volveremos mañana como a las 1 de la tarde ¿Estarás bien solo?- Pregunto la madre de Zedd mientras tocaba la puerta de su hijo minutos después de regresar de la escuela ese día viernes. -Eeeh si, claro, tu sabes que nunca haría esas exageradas fiestas de las películas, no me va eso jaja- En ese momento un pensamiento vino a la velocidad del rayo a la mente de Zedd -Toda la noche tu solo-.

Llegada la noche Zedd miró por la ventana como el auto de sus padres se marchaba a lo lejos en la ciudad. Era finalmente su oportunidad, Zedd sacó su almohada, buscó la falda, se cambió ropa, poniéndose además una sudadera roja, no se puso zapatos, se quedó con las medias en los pies nada más. Fue a la habitación de su madre y abrió el closet. En una repisa habían varios artículos de belleza como lapices labiales, rubores, brillos para los ojos, perfumes, etc. Zedd tomo un rizador de pestañas, un poco de rubor y un lápiz labial rojo opaco; nervioso por el resultado, Zedd fue con todo eso al baño y frente al espejo comenzó a trabajar con lo que tenía. Previamente había buscado como usar un rizador de pestañas. Tal como se menciona, empezó por sus pestañas, unas vez curvadas el resultado fue bastante de su agrado. Luego siguió poniéndose un rubor rosa claro en sus mejillas, al principio le gustaba pero luego se dio cuenta de que se excedió y le quedo la cara con 2 grandes puntos blanquecinos en las mejillas, así que con papel higiénico y algo de agua se quito todo y empezó de nuevo teniendo cuidado de hacerlo lento para que quedara bien. Después paso al lápiz labial, pero curiosamente este la verdad no le gustó en ningún momento, sentía que era muy exagerado, y si era honesto para si mismo, el lápiz labial en parte lo hacía sentir como una mujerzuela, así que se lo quitó. Por último sacó un cepillo para el cabello e intento arreglárselo, como tenía el pelo corto tampoco hubo mucho que pudiera hacer.

Ahí, frente al espejo se vio Zedd a si mismo, vestido con una falda y maquillado; podía sentir como su corazón latía con fuerza. Se miró desde varios ángulos, incluso con algo de vergüenza para si mismo, intento hacer poses de modelo frente al espejo.

Zedd se quedó vestido así hasta altas horas de la noche (hasta las 3 AM aproximadamente), pero para poder recordarlo, tomo otro pequeño riesgo. Volvió al baño, pero está vez con su celular en mano y entonces activo la cámara y se tomo una foto... Bueno, a decir verdad, se tomo unas 10 fotos, de las cuales se quedó 6, ya que a su parecer otras 4 habían salido malas. Se quitó la falda, la guardó; dejo las cosas de su madre en el clóset, y finalmente se dio una ducha para quitarse todo. Esa noche se fue a dormir con una curiosa sensación de felicidad.