Ipsum

S-37

Las horas pasaron mientras que ella observaba a su pareja dormir muy profundamente, ambos solo se encontraban cubiertos por una pequeña manta que en la cama se encontraba tendida y que con mucho esfuerzo ella había logrado sacar, pero la comezón y las sensaciones que había logrado sentir provocadas por las pocas pero suaves caricias permanecían muy tatuadas en su piel, tenia que ser muy sincera le había gustado y había sido excitante pero hasta cierto punto tenía miedo, se sentía un poco insegura, muy en el fondo sabía que él era Natsu pero no el que ella una vez conoció, ella quería a Natsu Dragneel, su Natsu Dragneel el gran hijo de Igneel, él orgulloso mago de Fairy Tail, él que se preocupaba por todos y daría todo para que a su familia no le pasara nada, pero intentando deshacerse de tales pensamientos se puso de pie tomo unas de las tantas prendas que había en uno de los armarios y salió de la habitación intentando no hacer cualquier ruido, sabía y lo sabía muy bien era injusta pero el Natsu Dragneel, él que ella conocía se encontraba aun ahí muy adentró de él, estando en la sala se vistió peinó sus castaños cabellos con su propia mano ya que su peine se encontraba en la habitación donde Natsu descansaba y decidió al menos por esa vez y como pretexto para distraer su mente cocinar algo para cenar y despues solo dormir ya que el sol se había ocultado por el horizonte, cerrando los ojos y con una sonrisa decidió algo.

Lenta muy lentamente abrió sus chocolates ojos, todo su alrededor se encontraba sumido en la oscuridad y no lograba reconocer el lugar,  alarmada brinco del suave lugar donde se encontraba recostada encontrándose en la habitación donde él peli rosa descansaba pero a excepción que este no se encontraba en la cama provocando que ella se preocupara y que con la vista recorrerá el lugar en busca de su compañero, fue en ese momento que la puerta de la habitación fue abierta y de la misma una cabellera rosada entró.

- No tenias por que haber dormido en la sala, te juro que no muerdo... Bueno aveces - dijo Natsu entrando a paso lento mientras la miraba con una sonrisa, ella rápidamente se acercó a él y recorrió con la mano sus mejillas y frente en busca de algún síntoma que reflejará que aún tenía fiebre.

- Estas bien? - Pregunto ella mostrándose preocupada.

- Si, no te preocupes - contestó mostrándole una sincera sonrisa, de forma cariñosa acarició una de sus mejillas mientras que la tomo por la cintura y la atrajo más a él. - Vamos el desayuno esta listo - ambos fueron a la pequeña sala tomaron asiento como otros días y de forma tranquila comenzaron a comer.

- Natsu... Te puedo hacer una pregunta? - Dijo Kana llamando su atención.

- Que sucede?- Pregunto él tomando un poco de vino.

- Para que quieres la llave - ambos detuvieron sus movimientos dejaron los utensilios para comer encima del plato y se miraron por unos segundos.

- Para nada- contestó él restándole importancia, sorprendiendo a la maga.

- Entonces, para que la creaste?- desconcierto se formó en su rostro, tomo un poco de vino y agarro la llave que se encontraba en el mismo sillón donde Natsu había caído recostado el día anterior.

- Yo no necesito la llave,  necesitaba el fuego celestial, de hecho se las daré a Lucy y a Yukino - dijo tomando el extraño objeto de sus manos.

- A las dos?, no es una sola llave? - era una pequeña llave dorada con destellos plateados, se diferenciaba de las demás antes el centro y su forma en si, era muy delgada pero la punta de la hoja tenía una extraña forma en cruz, la cabeza era plana pero tenía una corona de lo cristal tallada en ella lo que le daba una extraña sensación de poder.

- Si, pero mejor lo explico cuando vayamos al gremio - tomo el resto del contenido de la botella que tenía enfrente y se puso de pie.

- Iremos al gremio? -Pregunto mientras lo miraba desconcertada, sabía que Jellal y los demás le habían dicho a su padre de la relación que poseía con el peli rosa por lo que sabía las posibles reacciones que en el gremio se llevarían a cabo por lo que no estaba aun segura de dar la cara en su preciado edificio.

- Si - ambos terminaron de desayunar, dejaron los platos sucios en la cocina y decidieron prepararse para ir al gremio Kana se notaba claramente insegura actitud que causaba gracia en su novio pero sin importar que excusa diera iría para poder terminar una parte del trabajo. Ambos antes de ir al gremio caminaron por las calles de Magnolia en busca de que larga y tranquilizadora caminata antes del huracán pero extrañamente la ciudad se encontraba más activa de lo normal magos, reporteros y uno que otro ciudadano extranjero rondaban por las calles, a cada paso que daban y se acercaba al gremio cada vez más concentración de personas había.

- Que sucede? - Pregunto Kana sin embargo él no contestó, siguieron su camino al imponente edificio donde más reporteros esperaban algo, un acontecimiento que era desconocido para casi todos o al menos para ellos dos, al llegar miembros de Sabertooth, Blue Pegasus y Lamia Scale rondaban las afueras impidiendo que personas ajenas entrarán, sin embargo al ver a Alastor y a Kana llegar todos posaron su atención en ellos pero impidiéndole se les acercaran los magos de gremios aliados se interpusieron y abrieron un pasaje para que ambos entrarán al gremio, cosa que hicieron. Abrieron las grandes puertas y lo primero que entró en si visión fueron los magos de clase S de cada uno de los gremios presentes y a Gildarts con una extraña mirada observándolos.

- Por que la cara tan seria? - Pregunto Alastor pero ninguno de los magos contestó, solo Lucy se acercó a él le dio una medio sonrisa pero antes de que fuera capaz de hablar alguien se acercó.

- Luego hablaremos - dijo Gildarts señalando a ambos magos.

- Por que hay tantas personas afuera?- Pregunto Kana a su padre.

- Por él - dijo él señalando al encapuchado fue en ese momento que Wendy se acercó al Dragon Slayer y mostró una extraña revista.

- Es cierto? - Pregunto Sting a nadie en especial.

- Mandición - dijo Alastor con el ceño fruncido, notoriamente molestó tomo la extraña lacrima que siempre cargada con el y transfirió un poco de su magia en ella provocando que esta se iluminará.

- Ryu, estas bien - Pregunto una extraña voz desde la lacrima que Kana logró identificar.

- Que sucedió? - Pregunto él.

- Nadie lo sabe... Pero la noticia esta en todo el continente... Que hacemos?-

- Nada solo provocaron que nos anticiparamos, esta todo listo?-

- No todo, solo falta tu parte y una que otra cosa -

- Mi parte ya esta completa, pide permiso al Castillo para actuar cuando todo este preparado -

- Estan bien y que haremos con la noticia? -

- Ya no haremos nada, malditos pagarán todo lo que han hecho -

- Está bien...  Nos vemos- en ese momento la esfera dejo de brillar dejando a los magos presentes desconcertados, las hadas lo miraban expectantes y los "invitados" Solo mostraban más desesperación, Kana leía la noticia impactada rápidamente volteó su mirada a Alastor y este deslizó las prendas que cubría su cabellera y su rostro lejos de su posición original de forma lenta, dejando ver sus azabaches cabellos y su café mirada, en un momento todo el gremio se lleno de una cálida y muy brillante luz.

- No es posible - ante todos ellos el actual rey de los dragones de fuego apareció.