No Te Enamores(Remus y Tonks)

Continuación...

Tonks

Ya pasamos la primera luna llena como esposos, creo que fue la más difícil que hemos pasado. Remus se puso de un humor insoportable que ni Peter ni James pudieron controlar, Sirius había intentado calmarlo pero lo único que consiguió fue ponerlo peor así que me dijeron que solo le diera chocolate y dejara que se le pasara. Después de luna llena se disculpó con todos, en especial con Sirius y conmigo.

En otras noticias faltan dos semanas para la boda de James y Lily, el once de Agosto. Ellos están bastante bien, su boda es en la casa de James con alrededor de cincuenta invitados más o menos.

En estos momentos me encuentro caminando por las calles de Londres muggle rumbo a mi casa con Remus, una casa grande y hogareña herencia de la abuela muggle de Remus, no quedaba muy lejos del valle de Godric así que fácilmente podíamos visitar a James y Lily.

Se me hace raro que los focos de luz estén apagados, ya es noche. Decidí caminar más rápido para alcanzar el callejón. Vi una tenue luz en un almacén de ropa pero seguí caminando. Un ruido de vidrios quebrándose me hizo parar de golpe mi camino, voltee a ver y vi a un hombre tirado en el piso entre pedazos de vidrios rotos. Vi el almacén y me di cuenta que de ahí había salido disparado el hombre. 

Escuche estruendos en el almacén, se veían rayos de luz verdes y rojas, era obvio que habían magos.

Se que no debí pero me acerque corriendo varita en mano al almacén.  Entre por donde antes había vidrio y vi a dos personas con capucha pelear con una mujer, habían otros dos encapuchados en el suelo y un hombre de edad avanzada notoriamente asustado intentando protegerse detrás de una pila de ropa.

- Desmaius -lancé a uno de los mortifagos.

- Expeliarmus -desarmo el otro Mortifago a la mujer y le lanzo un hechizo no verbal haciendo que esta cayera.

-  Avada Kedab..-

- ¡Expulso! -grite antes de que me matara. El mortifago salió volando pero otro más se levanto del suelo.

- Expeliarmus -grito el mortifago.

- Protego -conjure antes de que el hechizo me diera.

- Desmaius -grito el otro Mortifago pero esquivé fácilmente el hechizo.

- ¡Stupefy! -

- Avada Ke...-

- Flipendo -grite. El mortifago salio disparado por los aires pero el otro Mortifago que desmaye se había recuperado.

- ¡Expulso! -grito y salí volando cayendo en una mesa, me golpeé fuerte la cabeza en la parte de atrás.

- ¡Avada Kedab..! -

- ¡Desmaius! -gritaron detrás de mi para mi sorpresa el hombre que había caído a través del vidrio.

- ¡Colloshoo! -grite haciendo que el mortifago no pudiera despegar sus pies del suelo- ¡Petrificus Totalum! -

- Crucio -caí al suelo sintiendo el más grande dolor que jamás había sentido.

- Finite -dijo el Hombre poniéndose de pie con dificultad. De repente el dolor desapareció.

- Cruci...-

- ¡Immobulus! -grite.

- Avada Kedabra -grito el último mortifago al hombre, él hombre lo esquivó y el hechizo golpeara a un maniquí- Incendio -dijo haciendo que varia pila de ropa se incendiara, empezó a incendiar todo a su paso.

- Petrificus Totalum -dije apuntando al hombre.

- ¿Esta bien? -le pregunte al hombre detrás de mi.

- Si -dijo temblando- Pero mi esposa... -dijo y empezó a ver por todos lados. El hombre que estaba escondido jaló a la mujer que se encontraba tirada en el piso- Cariño -dijo acercándose a ella- Despierta -le decía moviéndola desesperadamente.

- No esta muerta, llevela a San Mungo -le dije.

- Gracias -dijo antes de desaparecer. Empecé a darme cuenta que el fuego crecía y que uno de los mortifagos empezaba a reaccionar.

- Su varita, pronto -le dije al hombre.

- Yo... Yo no -decía con algo de miedo. Era muggle al parecer.

- Vamos, no hay tiempo -dije, tome su mano y desaparecí llevándonos a un callejón- ¿Qué fue lo que paso? -le pregunté.

- Los mortifagos llegaron a la tienda a querer atacarme, dos magos llegaron y empezaron a batirse en duelo, al parecer son Aurores -explico dejándome más confundida que antes.

- ¿No es muggle? -le pregunté.

- Soy Squib -dijo. Vi heridas en sus brazos y cara.

- Venga, lo curaré rápido -dije y empecé a curarlo haciendo movimientos con mi varita. Un minuto después se escucharon ambulancias muggles- Espere, no salga aún -le advertí y me asomé a ver, los focos de luz ya se estaban encendiendo y hombres trataban de controlar el fuego- No es seguro aquí, tiene que irse -le dije al hombre que temblaba de pies a cabeza- Tomé, es díctamo, le ayudara para las demás heridas -dije tendiéndole un tarro de díctamo.

- Gracias señorita -

- ¿Dónde es su casa? -le pregunté.

- No es lejos de aquí. Iré yo solo -dijo firme, admiraba su valor- ¿Él ya está aquí verdad? La guerra es inevitable -

- Vayase lejos de aquí, lo más lejos que pueda -dije.

- Gracias de nuevo -dijo el hombre saliendo del callejón. Lo vi irse y hasta que no lo visualice más desaparecí de allí, aparecí en la sala de mi casa que para mi sorpresa se encontraban James y Lily hablando con Remus. Me voltearon a ver asustados y preocupados.

- Amor -dijo Remus acercándose a mi.

- ¿Tonks? -dijo James acercándose a mi junto con Lily.

Sentí un líquido caer por mi nuca y un dolor pulsante en mi cabeza. Inconscientemente lleve mi mano a ese lugar luego la vi dándome cuenta de la sangre que caía de ella. Vi a James y Lily, luego desvíe la mirada hacia Remus.

- La guerra comenzó -

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Próximamente

★Feliz Noche Buena★