Sádico amor | Yoonmin

08

Fue bastante extraño ver como una erección crecía en medio de las piernas de Hoseok.. El chico no se tocaba hace como un mes y nada lograba despertar esa sensación de necesidad sexual. Personas no le faltaban para tener sexo, pero ganas sí, desde que Yoongi había terminado con él, todo había cambiado mucho, el sexo dejó de ser una prioridad en su vida, y aunque estaba relajado por ya no sentir dolor, igual estaba extrañando el placer.

El desempeño sexual de Tae estuvo por los suelos un largo tiempo, no porque no quería, simplemente estaba a punto de repetir el mismo curso. Se concentró tanto en poder aprobar que se olvidó de las fiestas, el alcohol y el sexo. Luego de eso sólo se basaba en masturbarse mientras tomaba un baño con agua fría y miraba en su celular una foto de Hoseok.. Y a la vez otra de su pequeño conejito.

Por otro lado, Jungkook, nunca había tenido sexo, pensaba que si estaba  enamorado de Taehyung no tendría por qué tener sexo con otra persona y ilusionarla a que puedan tener algo serio. Estaría mintiendo al decir que nunca se había tocado, porque Taehyung le ponía mucho, lo bueno de tener un padre que sólo trabaja, es que tienes dinero y tiempo, si te compras un dildo nadie lo notaría, y mucho menos si le das un uso cada vez que te excites.

Porque sí, el pequeñito y adorable Kookie se metía un gran dildo de veinte centímetros por el culo, mientras que gemía y gemía sin ninguna vergüenza contra la almohada azúl pastel que tenía y recorría todo su pene con una mano.

Jungkook siempre se reía internamente cuando alguno de sus mayores le decía tierno, la imágen de él tocándose recordaba que no tenía nada de inocente y/o tierno.

Aún nadie se atrevía a hablar, pero a Jungkook le llamaba muchísimo la atención el gran bulto que tenía frente a él, las ganas de hacer una mamada crecían en él, querer pasear su lengua por alguna glande era su mayor deseo, específicamente, la glande de Taehyung.

Jungkook sin pensarlo dos veces, baja el pantalón del mayor y logra observar el falo de éste, sus ojos brillaban con un gran deseo en su rostro. No era el de Taehyung, pero podía hacer una excepción, era algo demasiado largo y grueso, venoso hasta la glande, y esta, rojisima e inchada, algo que hacía mucho más deseoso al menor.

—¿P-Puedo? —Dijo el menor de todos.

La pregunta en Hoseok se quedó plasmada, ¿En serio quería hacerlo? Era su pequeño, le impresionó muchísimo el atrevimiento que optó éste como para simplemente bajar su pantalón sin su consentimiento. Y mucho más, el echo de que quisiese tocarlo.

Sólo será sexo Jung, relájate —Pensó.

—Puedes

Lo primero que hizo el menor fue posicionar su mano en medio de toda la erección y ladearlo levemente hacía él, para así poder observar determinadamente las venas inchadas que decoraban la punta y todo el falo. Pasó su lengua por el principio disfrutando de la sensación, su mayor deseo sexual se estaba cumpliendo y vaya que lo estaba disfrutando, mucho más al sentir los gruñidos del mayor, quizás lo estaba haciendo bien, por lo que lo hizo repetidas veces más, con lentitud y cuidado. Sentía que era un pequeño helado, que necesitaba delicadeza al ser lamido, sólo para que Hoseok pudiera disfrutar de aquello.

Taehyung sólo miró impresionado todo, en menos de cinco minutos ya iban a tener sexo, y en menos de uno ya estaba con la erección más dolorosa de su vida. Al ver que estaban en confianza no dudó ningún segundo en sentarse al lado de Hoseok y sacar su erección afuera, para así masajearlo el mismo, cerrando los ojos por el placer y soltando leves jadeos.

La mirada del menor nisiquiera pasó a los ojos de Taehyung, si no, a su miembro, sus ojos brillaban más y más, ¿Podría actuar como un niño caprichoso y lamer los dos como unas paletas de caramelo? Claro que sí.

Sin vergüenza alguna, se posicionó en medio de los dos y quitó la mano de Taehyung en su miembro, lo miró a los ojos con una gran sonrisa y comenzó a lamer su glande, pasando esta por toda su lengua.

—No te olvides de mí, pequeño —Habló el mayor de los tres.

Al escuchar eso, Jungkook movió su mano rápidamente, apretando de vez en cuando esta para darle más placer al otro. Tenía a sus dos Hyungs a su merced, locos gimiendo por más. Se metió todo el pene de Taehyung a la boca y pudo sentir como la punta tocaba su garganta, sintiendo el ardor y queriendo más, movió su cabeza de arriba hacía abajo insitando a que éste moviera sus caderas, para así penetrarle fuertemente la boca.

Taehyung entendió lo que quería el menor y movió sus caderas, al principio lento y luego de una manera bruta. Jungkook lo hacía de lo mejor, cubría sus dientes con sus labios y hacía presión, dándole mayor satisfacción, estaba llegando al clímax, y definitivamente necesitaba más. Arqueaba su espalda de vez en cuando  y miraba a Hoseok con los labios entre abiertos, jadeando.

—Joder.. Jeon, lo haces.. Demasiado.. Mhh Bien.. Ah~

El mayor de los tres frunció el ceño y miró a Jungkook, quién disfrutaba de lo que hacía y recibía, podía notar la lujuria en sus actos, vaya que había pensado mal del menor, nunca se lo imaginó así. Eso por una parte le molestaba, ¿Por qué Taehyung se llevaba lo mejor y otro tipo de placer? El quería sentir También lo bueno que era haciendo mamadas— Hey, yo también q-quiero, conejito..

Jungkook levantó la cabeza, y dió una hermosa y placentera imágen a los dos. Tenía los ojos llorosos, sudor en la frente y algunos mechones de cabellos pegados en esta por el mismo. Soltó una sonrisa y comenzó a masturbar a Taehyung, mientras que se metía ahora el gran pene de Hoseok a su boca.

Comenzó lamiendo la punta y luego miró a Hoseok travieso— Penetrame la boca.. Daddy —Definitivamente eso había prendido a Hoseok y sólo bastó que subiera sus caderas, como para sentir como sólo la mitad del pene de éste entraba en la boca del pelinegro.

Movió sus caderas más brusco que Taehyung, hace muchísimo no había atendido a su pene, esto cada vez más le estaba fascinado, éste era otro tipo de placer, uno sin dolor, y joder.. quería sentir mucho más..

—¡aHHH! ¡aHH! ¡Joder! ¡Mhhh, sí, sí! —El menor pudo sentir como su mano se humedecía, Taehyung se había corrido sin siquiera haber avisado, pero el menor no sacaría el pene de Hoseok de su boca hasta que se hubiese corrido, porque quería sentir su escencia.

—Me.. Me v-vengo.. —Anunció el pelirrojo mientras arqueaba su espalda y soltaba un gran gemido— ¡Siii! ¡Mghh! —Por fin había llegado a su deseado orgasmo, y de seguro, el más bueno de estos últimos meses.

El menor sacó el pene de su boca mientras jadeaba exageradamente, estaba sintiéndose tan bien mientras complacía a sus mayores, que no se había percatado que el oxígeno le estaba haciendo falta.

Los mayores lo miraron jadeantes y aún sin poder asimilar lo que había pasado, tenían un lado de Jungkook que nadie más había visto, y bueno, ese lado nunca nadie lo había visto.

El menor sin decir nada, sacó su pequeña erección de su pantalón, lo miró y con su dedo índice comenzó a tocar su glande con algo de pereza— ¿Y quién me atiende a mí?...

Los mayores se miraron dudosos..

¿Quién de los dos le haría sentir placer a su pequeño conejito?