-Deje su mensaje después de la señal.
Un suave pitido me indica que puedo comenzar a hablar.
-Hola, Harry, soy Brianna. ¿Qué tal? Hace un par de meses que no hablamos y, bueno, te echo de menos.-Hago una pausa para respirar profundamente y prosigo.-Ayer fui al parque en el que nos conocimos. Todavía recuerdo cuando, después de pillarme mirándote varias veces, te acercaste a hablarme. Qué vergüenza pasé, sobre todo cuando me sonreíste por primera vez. Y no hablemos de lo que me costó decirte mi nombre. Solo tartamudeo en situaciones excepcionales, así que deberías sentirte especial.
Río y niego con la cabeza suavemente.
-Volviendo a lo que quería decirte, ¿te acuerdas de aquel árbol tan grande que había en medio del parque? He visto lo que escribiste. Pensé que nunca lo encontraría y, bueno, que sepas que yo te quiero más.-Antes de volver a hablar, me doy cuenta de la sonrisa que ha aparecido en mis labios y la hago desaparecer.-Mejor cuelgo ya, llevo días sin dormir y necesito reponer fuerzas, aunque me falta mi principal fuente de energía... Buenas noches.
Cuelgo.
