Amor incontrolable (Las Crónicas de Narnia: La Travesía del Viajero del Alba)

Capitulo 6: La niebla Verde

Narra Caspian

Después de separarnos nos llevaron a Edmund y a mi a un calabozo en una torre pero mi mente solamente se ocupaba en pensar en salir de aquí y rescatar a mi familia.

El simple hecho de pensar que no fui capaz de proteger a mis amigos y a mi reina me hizo enfurecer así que le di un golpe a la puerta con la esperanza de que esta cediera y así poder ir a buscar a mi esposa.

El sonido del golpe hizo que Edmund se levantara de donde estaba acostado.

-¿Estas bien?-Le pregunté a lo que él simplemente me dijo que si; al ver que se incorporaba seguí con mi tarea de tratar de tirar la puerta.

-Es inútil.-Dijo una voz desde lo más oscuro del calabozo.-Jamas van a escapar.

-¿Quien esta ahí?-Pregunte lo más firme posible y acercándome a investigar.

-¡Nadie! Solo una voz en mi cabeza.- Cuando estuve lo suficientemente cerca pude ver que se trataba de un hombre anciano, descuidado y muy familiar.

-¿Lord Bern?-El hombre retrocedió sorprendido por ser reconocido y luego simplemente me contestó.

-Lo fui hace mucho pero ya no merezco recibir ese título.

Voltee a ver a Edmund

-¿Es uno de los siete, Caspian?-Me preguntó y yo me acerqué al rostro del hombre solo para asegurarme que era Lord Bern. El hombre también empezó a estudiar mi rostro.

-Tu rostro...Me recuerdas aun rey al que alguna vez fui leal.-Me contó Lord Bern a lo que sonreí inconscientemente .

-Ese hombre era mi padre.

-¡Oh!,¡Mi señor!,¡Perdóneme!-El pobre hombre trató de levantarse con mucha dificultad.

-No, espere...espere.-Le ayude a ponerse de pie cuando el grito de una mujer me devolvió a la realidad.

Edmund rápidamente se acercó a la ventana para ver qué es lo que pasaba afuera de nuestra celda así que yo también me acerque y contemple lo que pasaba debajo de nosotros.

Era una carreta con mucha gente dentro de ella y guardias escoltándola y en la parte de atrás venía una mujer que gritaba con todas sus fuerzas mientras su familia trataba de llegar a ella. Su esposo trató de rescatarla pero los guardias lo golpearon y quedó tendido en el suelo mientras le gritaba que la encontraría. Después de eso se llevaron a la gente de la carreta a la bahía y los empezaron a subir a un bote.

-¿A donde se los llevan?- Le pregunte al Lord y el me contesto que siguiéramos mirando.

La escena que mis ojos contemplaron me perturbo demasiado pues el cielo se oscureció conforme iba avanzando el bote y de la oscuridad salió una niebla verde que envolvió al barco y lo hizo desaparecer con todo y las personas que llevaba a bordo.

-¿Qué les pasó?-Pregunto Edmund

-Es un sacrificio.-Explicó Lord Bern.

-¿A...a dónde se fueron?-No pude evitar sentir preocupación por saber dónde estaban esas inocentes personas.

-Nadie lo sabe;la bruma empezó a llegar desde el este, reportes de pescadores y marinos desaparecidos.-Me comentó Lord Bern.- Los siete hicimos un pacto: Hallar la fuente de la bruma y destruirla. Todos partieron pero ninguno volvió. Ahora, si no logran venderte a los traficantes,entonces te envían a la bruma.

-Tenemos que hallar a las chicas.-Dijo Edmund un tanto ansioso.-Antes de que sea tarde.