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Leave the window open (and your heart too) » SeBaek

Personajes: SeHun/BaekHyun (Sebaek)
Rating: PG
Género: Fluff
Palabras: 2.8K
Resumen: Sehun había cogido el extraño hábito de trepar hasta la ventana de Baekhyun por las noches y colarse en su cama sin invitación. El mayor sólo lo permitía porque detestaba el frío y Sehun era una fuente confiable de calor. Pronto repararía su ventana de todas maneras.
Fecha: Diciembre 2018
n/a: Gimmick!au (un manga)

El estridente sonido de la alarma crepitaba insistente entre las paredes de su habitación, obligándolo a retornar de la quimera de su inconsciencia.

Baekhyun se removió perezoso entre sus sábanas en busca de unos minutos más de sueño. Su cama se sentía tan cómoda y cálida que la sola idea de separarse de ella y terminar con esa complacencia era una verdadera tortura.

Allí, entre el correr de los minutos, permaneció enredado entre mantas gruesas y sueños a medio terminar, hasta que, siendo apenas consciente, logró percibir un ligero movimiento junto a él, alejando su fuente de calor por un segundo.

Gruñó como protesta.

«espera un momento... ¿fuente de calor?»

Baekhyun abrió los ojos de golpe, con el corazón bombeando a mil por hora, y apresuró a levantarse y revolver con desespero las sábanas que cubrían el bulto a su lado.

—¡Sehun! ¿¡qué mierda!?

Aquí vamos otra vez.

—Tú —llamó la atención del menor ahora sentado frente a él—, ¿cuántas veces tengo que decirte que no duermas en mi cama?

La voz de Baekhyun retumbó en la estancia interrumpiendo el silencio de la mañana que solía ser acompañada sólo por el ligero sonido del viejo calefactor que le regaló su madre hace dos navidades, y por el ocasional choque de cubiertos y loza mientras desayunaban.

Era demasiado temprano para lidiar con esto de nuevo, pero ya debía comenzar a acostumbrarse.

Esta no era la primera vez que el mayor despertaba en compañía del chico frente a él. Desde hace un tiempo, Sehun había cogido la extraña costumbre de colarse en su cama de vez en vez sin explicación alguna y cada vez sucedía con mayor frecuencia. Si bien, Baekhyun adoraba con su alma a su larguirucho dongsaeng, había algo en esa acción en particular que no dejaba de molestarle justo en la boca del estómago. Era una sensación tan extraña que aún no estaba seguro de si era buena o mala, por lo que prefería no sentirla en absoluto. Además, no tenía ganas de ahondar mucho en ello. Él nunca ha sido del tipo "pensador", de todas maneras.

Sehun sencillamente se encogió de hombros.

—No lo puedo evitar. No hay ninguna otra cama cerca —respondió el menor sin siquiera voltear a verlo. Parecía más concentrado en beber su gran vaso de leche y engullir insoportablemente despacio lo que sea que estuviese comiendo.

—¡Por supuesto que no hay más! ¡Es mi jodida habitación! ¿qué esperabas, idiota?

Baekhyun masajeó sus sienes con frustración ante la actitud engreída del más alto. No podía creer lo que decía. Ni siquiera su querido café matutino lo ayudaría con el mal humor que Sehun le provocaba a veces.

—Por cierto, deberías cambiar el sonido de tu alarma. Es molesto y no logra despertarte.

Era el colmo.

Desde su posición, el más bajo levantó la mirada irritado por tanta desfachatez. Primero, ¿dónde quedó el hyung en su vocabulario? ¡Merecía más respeto, joder! Segundo, quién se cree este mocoso para ordenarle lo que debe hacer. Y tercero, y más importante, ¡sí se despierta! Sólo que no consigue levantarse... inmediatamente.