Jimin entró al departamento, cerro tras de sí y como siempre se quitó la ropa. Hasta la sesión de fotos no había apreciado nunca el aire acondicionado del departamento. Se subió a la cama y se vendó los ojos, se arrodillo en medio del colchón y atravesando el techo de la cama con un segundo pañuelo se ató del modo que pudo las muñecas.
Pasaron algunos cuantos minutos que a el le parecieron más tiempo de lo normal, pero
Jimin lo atribuyó a su particular posición. Luego de escuchar a través de las tinieblas cómo las llaves caían sobre la mesa, pudo percibir como él lo observaba en silencio a la distancia.Al fin sintió cómo la cama se hundía por el peso de él
aproximándosele.Él le arregló las ataduras ajustándoselas con firmeza y mucha mejor destreza, luego paseó los dedos por su cuerpo despacio, recorriéndolo
como si le estuviera haciendo cosquillas suavemente, Jimin se
estremeció, sabía que no debía gemir, pero se sintió a punto.
Por suerte él lo dejo a tiempo, y luego se tendió en la cama. Por
entre sus piernas, Jimin supo que deslizaba la cabeza de él para situar su boca justo en el lugar preciso para comenzar a hacerle sexo oral.
Jimin conocía de memoria la regla de no emitir sonido alguno, ni gemido, mucho menos algún grito y nada de hablar, pero tuvo que tragarse la vida y morderse la lengua, para no reventar sus pulmones de goce cuando terminó, él parecía estarlo poniendo seriamente a prueba.Inmediatamente después de que el estallara en absoluto silencio,
él se deslizó más y cómodamente acostado sobre el colchón comenzó a penetrarlo una y otra vez haciéndolo subir y bajar suavemente y con paciencia, sin apuro y sin pausa hasta terminar él en silencio. Luego descansó unos minutos.
Jimin sabía que debía esperar. Para cuando el comenzó a
recordar sus muñecas, él se arrodillo junto a el y levantándole las piernas
hizo que con ellas lo envolviera por la cintura y lo volvió a penetrar con un
deslizamiento perfectamente húmedo.
Él lo sostenía fuerte por el trasero y el ayudaba al movimiento con la fuerza de sus piernas de modo que a pesar de estar colgado, sus
muñecas no sufrían tanto. Además, todo le parecía tan excitante que casi le daba igual, pero igualmente, el no terminó esta vez, sólo lo hizo él.
Tal vez el fuera adivino, pero en el momento en que el no daba
más y sentía sus manos adormiladas, lo descolgó.Lo recostó en la cama y sin volverlo a atar volvió a penetrarlo hasta que los dos se terminaron prácticamente juntos.
El sabía que él no continuaría. Contadas veces había ocurrido que se echara más de dos polvos seguidos y eso no ocurría desde hacía mucho, pero aun así lo disfrutaba dentro de el disfrutaba el calor de su
cuerpo y su peso encima.
De pronto algo extraño ocurrió, él lo beso. Primero lo beso
débilmente de un modo tímido y luego con pasión y con cariño. Lo siguió besando unos cuantos minutos, eran besos perfectos y su boca encajaba
en la suya como hecha a medida.
En algún punto el supo que se había equivocado, y en un rato, él continuó una vez más, activado por la pasión de aquel desliz. Era la primera vez que lo besaba en dos años que estaban juntos.
![](https://img.wattpad.com/cover/170798965-288-k62386.jpg)