── O7 ،، capítulo siete ៹ la hago de oro.

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-A veces, me pregunto si las personas cuando mueren encuentran las luz que tanto les faltaba a sus almas... me pregunto si las almas gemelas cuando mueren, se encuentran o hay que seguir buscándolas... me pregunto si ya terminó esta weá, weón.- exclamé tirando el cuaderno a la chucha.

-Hermaaaano, pa' qué tan así. La idea es que seai cursi po. No le pediste pololeo pa san Valentín, y tampoco para su cumpleaños, no wei po, amigo.-reclamó el tae.

-Ya, cálmense. Puede que luego, JungKook se sienta presionado, y no queremos eso, ¿verdad?. Esto es solo cosa de practica y concentración.- dijo el jin calmándonos.

-¿Sabis qué?, regalale un dildo rosao con brillos. Así conquisté al Jin.- comentó el nam y todos reímos como weones.

-Por estúpido, hoy no le pondrás la salchicha al pan.-sonrió el jin, el Nam lo quedó mirando mal y reímos nuevamente.

Ya todo había pasado. Habían pasado dos meses desde la primera vez que me di ese beso con la Rosé. El Jin y el Nam estaban pololiando, ambos confesaron su homosexualidad unas semanas después del carrete y obviamente, todos los felicitamos. El Tae seguía embobado con a Jisoo y viceversa. Estos dos weones no sé hasta cuando mierda van a fingir. La Rosé y yo hemos estado avanzando, hemos salido y hemos hecho... varias cosas, claramente no hemos tenido relaciones sexuales, no aún.

El Jin se dio media vuelta caminando hacia mí y suspiró con los ojos cerrados.

-JungKook, ¿haz hablado con el chico de estatura baja el cuál su nombre es desconocido aún para mi?

-¿Cuál?, ¿el que anda siempre con el loquito grande, medio chureja y es bien lindo?

-¡Sí!, ese. Creo que su nombre era... Jehoon, Perrón, Webón, Jihun

-Es Jihoon, aweonao.- le corregí y reí.

-¡Eso!, le apodan buzzi, misi, Messi, sushi...

-Woozi, enfermo culiao.

-Ay, ya, perdón. Saben como soy.

-Viene hoy, tiene que venir a dejarle la mercancía a mi mami.-comentó el Tae y yo asentí.

-Oigan... ¿el woozi tiene pololo...?- preguntó el JiMin y yo reí.

-Sí po, tonto culiao. Está pololiando con el Joshua. Si yo fuera gay, dejo a la Rosé por ese weón. Es entero lindo, ¿sí o no, Jin?-le pregunté y sonreí.

-Pucha... sí po, jaja. Igual es guapo el niño.-y la bestia saltó, amikos.

-Kim Seok Jin, hoy me vas a entregar el dildo, no te lo voy a pasar en una semana más y no te dejaré cocinar por dos días.- cagó po.

-Pero... mi amor, yo solo le respondí con la verdad.

-A penas lleguemos a la casa quiero el dildo en la cama, ¿ok?, ok.

-Pero...

-Sí, yo también me amo, juju.

-¡Vecinaaa!. ¡Llegó la sandía, llegó la sandía!.-gritó un weón desde afuera.

-¡Oh, chucha!. Llegó el Tae, juaz juaz. -exclamó el Tae y se asomó por la ventana.

-¿Cuál?, ¿tenís un clon acaso?

-El Taeyong, sacowea.-miró por la ventana y sonrió--¡Weeeena, shipamoogli!-se empezó a reír como weón.

-¿Viene con el té?

-Es Ten, aweonao.-le corregí al JiMin.

-Ese. Es la misma weá.

-No, viene solo. Dejó a la vieja en la casa.

-¡Ooooe, chancho culiao, baja y ven a abrirme que hace cualquier de calor!

-¡Calmao, zángano culiao!.-gritó y bajó hecho un peo.

-Hermané, yo tenía que hablar con el Ten, weón.-murmuró el JiMin y yo lo miré.

-¿De qué?. Parece que vendrá después. Es viernes, weón, los tíos no están y demás este weón se raja con carrete. Las chiquillas también van a venir.

-Es que... No, nada.

-Qué po.

-Nada, hermano, nada.-Se levantó y se fue.

-Qué chucha. Anda con la regla el perkin culiao.

-No sé, quizá anda con la weá.-se acercó el Nam y suspiré.

-Hermano... ¿Hay cachao como anda la Lisa con el JiMin?

-Mh... ¿Por qué?

-Puta... Es que, el otro día los ví súper juntos, weón. Igual, cacho la onda que tienen el Tae con la Jisoo po, pero aún así... No sé qué onda.

-Que yo sepa, el Tae va a terminar con la Lisa, por lo que me dijo. Han hablado, el y la Jisoo de toda la weá. El otro día cuando se comieron, puta, igual me sentí mal, pero... El Tae me ha contado weas brígidas.

-¿Qué te ha dicho?-me preguntó acercándose.

-Cachó a la Lisa comiéndose con un weón de la pobla. Puta, me sentí mal, pero, al Tae no le importó, ¿cachai?. Se nota desde lejos que esa weá no funciona.

-Weón, voy a terminar con la Lisa, hoy, quizá.-se metió el Tae entre medio de nosotros y nos miramos incómodos. -¿Les pasa algo?

-No... O sea, hablábamos de ustedes, pero nada más.

-Ah... Puta, no sé, ustedes ya saben todo po.-asentí con mi cabeza y rasqué mi nuca.

-Weeeena, weones.-llegó el Taeyong y me levanté.

-Weena, caeza de chanchooo.-reímos y nos dimos un abrazo.- ¿como andai?

-Ahí po, como weón yendo de un lado a otro. Ando trabajando en esta weá de las sandías, vendo fruta, verduras, toda la weá. Y los fin de semana la paso con mi wawa po.-todos lo miramos y empezamos a reírnos como weones.-¿qué weá?

-Con tu... Wawa.-reí y le pegué un pape.-macabeo culiao.

-Eris pesao, weón.

-Si es verdad po, hermano.-dí palmadas en su espalda.

-Oigan, ¿a qué hora llega el YoonGi?-preguntó el JiMin entrando a la pieza.

-Va a llegar mañana a las once de la mañana, perrito. Hablé con el en la mañana, me dijo que la Jennie no se quería venir así que se van a quedar un día más.- dijo el Tae.

Los dos andaban en pichilemu. Se fueron de vacaciones como hace dos semanas y ahí andaban. No me sorprendería si la Jennie vuelve preña'.

Las horas pasaron, ya eran las diez de la noche y estabamos en la cama todos acostados; el Jin, el Nam, yo, el Tae y el JiMin.

-¡CONCHETUMARE!-saltó el Tae.

-¡¿QUÉ PASA?!-me paré yo.

-¡SALE CARRETE EN LA CASA DEL HOSEOK, CONCHETUMARE!.

-¡BIEN, CONCHETUMAREEEE!

Todos nos paramos y empezaron a tomar sus weas para salir corriendo para abajo.

-Llamen a las cabras, weones. Hoy se termina y se empieza una relación.- dije una vez que estábamos en el auto y sonreí.- hoy la hago de oro, conchetumare.- reímos y el Jin empezó a manejar.

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꒰ I dꪮᥒ't ᥴᥲɾᥱ ♡ ¡chilensis!〃﹙bangpink. ꒱  ( ꈍᴗꈍ ) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora