Mientras yo te Ame

¿Que te parece si empezamos ahora?

CAPITULO 3

— ¿Siempre eres así de callado?—Mi pregunta rompió el silencio en el que se había sumido la cena, el levanto la mirada para prestarme atención.

—No veo un tema interesante para entablar una conversación—Su respuesta fue breve y concisa, tome la servilleta la lleve a mis labios, incomoda.

—Pues en eso no estoy de acuerdo contigo, te conozco muy poco y se supone que somos un matrimonio—Hizo una mueca de lo que interprete era exasperación.

—Tienes cuatro preguntas...utilízalas bien porque después de eso no diré ninguna palabra—Sonreí entusiasmada, algo era algo y esas cuatro oportunidades me sentaban de maravilla para llenar los agujeros vacíos que tenía en mi mente.

— ¿Qué paso con tus padres? —El llevo el tenedor a su boca y mastico lentamente como si estuviera pensándose que responderme.

—Murieron en un accidente cuando tenía seis—Su respuesta y su frialdad me dejo helada, era la primera persona que hablaba de sus padres muertos sin siquiera delatar dolor en su mirada, Sebastián era tan cerrado.

—Ohh...Lo siento—Ahora me preguntaba si había sido un imprudencia decir aquello, pero era una de mis dudas más fuertes.

—No lo hagas, han pasado tantos años que ya ni siquiera lo siento, da igual— ¡Maldita sea! Su mirada provoco que quisiera hacerme pequeña, no quería exagerar pero en estos momentos Sebastián intimidaba y mucho.

Trague saliva y proseguí

— ¿Por qué te casaste conmigo? —El levanto las cejas sorprendido por mi pregunta, pero volvió a su pose normal después de unos segundos.

—Bruno se había casado y su padre Fabricio vio en él una oportunidad para presionarme, Frederick quería seguridad en nuestros negocios y yo se la brinde casándome contigo, eso son los dos únicos motivos—Podría haber dicho lo anterior sin la palabra "Único", pero parecía empeñado en decirme que lo nuestro era solo un negocio, no más.

Asentí

Bien era otra de comenzar con mi plan y atacar con todo ahora que me había permitido hablar y estaba respondiéndome.

—Porque si tienes la obligación de tener un hijo, no lo tenemos ahora, no veo la diferencia en hoy, mañana, en una semana o dentro de un año, podemos comenzar el proceso—Cuando levante la mirada observe que por primera vez el día de hoy me miraba a los ojos, parecía estar en una especie de trance o algo por el estilo.

— ¿Quieres que comencemos el proceso ahora? — ¿Acaso de toda la oración solo había escuchado aquello?, mi rostro debía ser un completo poema mezclado con un tomate o una manzana roja.

—Ehh...Tal vez—Esa era una respuesta algo estúpida, pero...maldita sea estaba avergonzada y mucho, no me había atenido a las consecuencias de mi tercera pregunta.

Dejo la servilleta que tenía en su mano sobre la mesa, mi mirada estaba centrada en cada uno de sus movimientos como si no quisieran perder de vista en ningún momento cada acción de su cuerpo.

—Seré sincero Artemis—Su tono delato que lo que iba a decirme no iba a gustarme—Pienso completamente distinto a ti, las relaciones físicas siempre terminan en algo mas y créeme es cierto, lo sé por experiencia—Paso las manos por su cabello oscuro—Se lo que intentas y déjame decirte que no funcionara o por lo menos no conmigo.

¡Hijo de...!

Plan A: Fallado

Plan B: En proceso