『Un otoño de color negro《 ・ 》⠨⠥⠝ ⠕⠞⠕⠻⠕ ⠙⠑ ⠉⠕⠇⠕⠗ ⠝⠑⠛⠗⠕』

II. Justo como no debimos conocernos

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Luk ~ ⠨⠇⠥⠅

Y ante la suavidad de un sol que ya comenzaba a darle paso a la tarde, uno de tantos Lucario en esa ciudad caminaba apresurado sujeto por una de sus patas, a la lejanía su expresión era de pura confusión, seguía las zancadas de su amiga Zurik. Su nombre Luk, era la simple variable de Luke, sólo que él mismo se lo cambió porque este último le sonaba espantoso, y no porque el que hubiese adquirido fuese distinto, pero él se animaba sabiendo no era el mismo.

      —¿Cómo?

      —Lo que oíste tontito, ella es ciega.

Luk aminoró la velocidad con la que se desplazaba por la calle, Zury que le sujetaba de una pata se percató del repentino cambio de ánimos en el Lucario junto a ella, en aquella avenida de frondosos árboles con hojas en plena transición al naranja, marrón y rojo; hojas hundidas en otoño, como todos en la ciudad. Caminaban envueltos en el ruido suave de una tarde realmente tranquila.

Luk abrió ambos ojos, su hocico se entreabrió también tratando de decir algo, sin embargo su compañera Zoroark sonrió, rodó los ojos y giró, al hacerlo logró hacer que todo su cabello rojizo golpeara de lleno al Lucario en la cara, haciéndole reaccionar y alcanzar a Zury.

—Lo dije mal; así sonó mal. Mejor así —comentó la Zoroark volviendo a tomar la pata de Luk—: ella es invidente, hace apenas unos meses dejó de ver.

Luk aún se sentía atontado, y la información dada tan naturalmente por Zury no estaba siendo muy bien analizada por el Lucario.

Justo el día de ayer Zurik le había hablado muy entrada la noche, siendo que en muchas ocasiones el sueño lograba alcanzarle bastante rápido y temprano ya estaba dormido, sin embargo no fue impedimento para contestar la llamada de su amiga.

"Necesito que me ayudes con algo mañana, [ella había dicho por teléfono], ¿podemos vernos en el Parque Mepuru?" Luk ignorante de las razones a su petición respondió con un sí, o tal vez fue el sueño el que le hizo contestar, de igual forma había llegado al parque que su amiga Zoroark había mencionado.

Caminaron por las calles con un rumbo que sólo Zury parecía conocer, compraron unos pastelitos glaseados y mientras los compartían ambos hablaban. Charlaron y caminaron hasta que a Luk le dio por preguntar a dónde era que iban, Zurik dijo: vamos a la casa de una amiga, tengo que presentártela.

Luk no evitó alzar una ceja, mostró los dientes en una sonrisa pícara disimulada y continuaron caminando.

—Pero, has de saber que ella no puede ver —La Zoroark declaró normal, Luk entonces descompuso sus gestos y en su lugar miró extrañado a Zury.

—¿Cómo?

—Lo que oíste tontito, ella es ciega.

・・・

Y Luk aún no acababa de asimilar eso cuando se detuvieron entre otros varios pokémon que esperaban a pasar la calle que estaba siendo transitada. Luk no tenía porqué sentirse así de raro por conocer a alguien ciego, lo que realmente le causaba curiosidad era saber los motivos de que Zury quisiera presentársela y justo ahora, querer saber también las razones de que ella nunca mencionase ayudaba a una pokémon invidente.

—Espera, supuestamente tú, ¿ella qué tiene que ver conmigo?

—Mmm, ella no puede ver, así que literalmente nada —Zury se encogió de hombros—. Tal vez tendrás no lo sé. Por ahora necesito tu ayuda con ella.