Give me love-Wigetta[Adaptación]#1

Cap 19

Mientras bailamos logro reconocer el rostro de Maléfica, es Laura que también está bailando.

-¡Hola! No hemos hablado desde...

-¿Te conozco? -me interrumpe.

-Soy Guillermo.

-¿En serio? Creo que ese disfraz te quita lo perdedor.

Continúa siendo la chica de siempre.

-Creí que tu y Karen ya...

Coloca la mano sobre mis labios.

-Recuerda que es un secreto.

-Perdón.

El baile continúa. Adoro su traje, Maléfica es una de mis villanas favoritas de disney y ha hecho un buen trabajo con su disfraz.

-¿No estás bebiendo?

-Por supuesto que no, la última vez casi me viola un chico.

-¿De verdad?

Lana llega con un par de vasos pero me niego a tomarlo, no es que sea un aburrido pero es que la resaca es intensamente terrible.

-Solo es soda -dice ella.

-Creí que era alcohol -tomo el vaso.

Después de beber más vasos de soda necesito ir con urgencia a liberar el liquido que sobra en mi vejiga, ya que el baño de la planta baja está ocupado, subo a la segunda planta en busca de uno, también necesito descansar un poco, eso de bailar no es lo mío y ahora me doy cuenta de que necesito hacer más cardio durante las horas libres de clase.

Por el pasillo observo muchas puertas, creo que será más difícil de lo que pensé. Abro una de las puertas, pero solo es una habitación vacía, intento con otra y es lo mismo, una vez más y ahora si lo consigo. Me siento satisfecho después de regar las plantas, es curioso ver que hay una paquete de esas cosas que las mujeres usan cuando les viene la regla, desde que tengo mi propio baño ya no tengo que lidiar con eso. Me lavo las manos y salgo listo para volver a divertirme. Estoy a punto de bajar las escaleras pero entonces escucho algo extraño, son gemidos de una chica. Tengo la necesidad de ignorarlo y marcharme pero noto que la puerta de donde provienen está abierta, la curiosidad me mata así que sigilosamente me acerco. No es posible, esto no puede estar sucediendo, es Karen, pero el chico con el que se acuesta no es Vegetta sino Luis. No quiero seguir mirando porque siento que voy a vomitar, pero cuando estoy a punto de bajar las escaleras comienzan a subir otros chicos, no deben de saber que me encuentro aquí así que me desvío a una habitación y cierro la puerta cuidadosamente. Con este silencio puedo pensar en lo que recientemente vi, no puedo creer que ella engañe a Vegetta con su mejor amigo. Se tiene que enterar de todo esto pero puede que no me crea, quizá piense que quiero que la abandone solo para estar conmigo. Tengo la esperanza de que uno de los chicos que se aproximaban también se hayan enterado de todo. Abro la puerta lo suficiente para confirmarlo, pero no hay señales de alguien en el pasillo y además los gemidos han desaparecido. Vuelvo a entrar a la habitación, de verdad hubiera deseado no ver nada, ya tengo bastantes problemas y este rebasó cada uno de ellos.

Me siento un momento sobre la cama, quizá pueda actuar como si mis ojos no hubieran visto nada de eso. De repente escucho que la puerta se abre, me doy la vuelta para observar quién lo hizo.

-Oh creí que aquí estaba mi chica, pero...

Es Vegetta que está disfrazado de marinero, hasta este momento me doy cuenta de que estoy en la habitación de Karen. En realidad me molesta que la llame de esa manera después de todo lo que ha sucedido y peor con lo que he visto hace unos minutos.

-¿Quién eres y qué haces aquí? -pregunta amenazante.

¿En serio? ¿No logra reconocerme?

-Te hice una pregunta.

Niego con la cabeza, no puede escuchar mi voz porque se dará cuenta de que soy yo, ya me siento un poco nervioso por no mencionar donde se encuentra su "chica"

-¿No hablas?

Vuelvo a negar, pero esta vez no dejo que me mire a los ojos, me doy la vuelta y me siento sobre la cama. Por un momento creo que se va a marchar pero escucho sus pasos acercarse. Solamente se sienta a mi lado.

-¿No te conozco?

Niego y a la misma vez aparto la mirada.

-Bueno seguramente no eres de la escuela.

Me encojo de hombros, no puedo creer que el antifaz y el sombre de verdad funcionen de esta manera. Vegetta suspira.

-Tengo un muchos problemas en este momento, espero encontrar a Karen para charlar un poco con ella ¿la conoces?

Asiento. ¿Cree que es el único que tiene problemas?

-De algo estoy seguro y es que esa chica ya no la amo, me encanta otra persona y es algo que no puedo evitar.

¿Se refiere a mí?

-Se supone que para todo príncipe se encuentra una princesa pero en esta ocasión no es así para mí -eso lo pensé una vez, nunca creí que él también lo vea desde esa perspectiva -seguramente piensas que soy raro en este momento pero yo no lo decidí, ahora entiendo por qué ninguna chica lograba llenar ese vacío en mí.

Con cada palabra que menciona logra tocar de alguna manera mi corazón, se está aceptando a el mismo en este momento. No puedo contenerme un solo segundo más y lo beso. Por supuesto él se sorprende pero cuando me separo sonríe.

-Ya reconozco esos labios -dice él.

Nuestro beso continúa, me quito el antifaz sin dejar de observarlo, me toma de la mejilla y poco a poco nos recostamos sobre la cama sin separarnos.

-Mi padre está aquí -logro mencionar entre besos.

-¿Qué?

-No importa.

Esta vez nuestros cuerpos chocan y una sensación que nunca antes había experimentado se apodera de mi cuerpo.

-En Nueva York besé a otro chico.

Esta vez si se detiene y me mira con el ceño fruncido.

-Es tu culpa, vas a ser padre y aún así me estas besando en este momento.

-Da igual si solo fue un beso -frunce los labios.

-Si solo fue eso.

Continúa besándome mientras lo tomo por la espalda. Necesita saber que lo vi hace unos instantes con su chica, pero me detiene escuchar que la puerta se abre, ambos nos detenemos asustados.