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ɪɴ ᴛʜᴇ ᴡᴏʀʟᴅ ᴏғ ᴘᴏʟy.
 

ᴏᴍɴɪsᴄɪᴇɴᴛ ɴᴀʀʀᴀᴛᴏʀ

Poly miraba por medio de la ventana del auto el bello paisaje de la ciudad de Canadá.

No le prestaba atención a nada, estaba muy entretenida con sus propios pensamientos... como casi siempre.

Louis, su hermanastro, sólo se dedicaba a manejar hasta el minisuper mercado. Necesitaba ir al baño e ir a ese local era su única salida diaria.

Cuando Poly vio que ya estaban a dos calles de el local intento acomodar su cabello.

Cuando menos espero, Louis ya se había estacionado.

- Voy al baño, ahora vuelvo.

Ella sólo se limitó a guardar silencio.

Las conversaciones no eran lo suyo en absoluto.

Cuando Louis entró al baño ella tomo tres dólares que estaban en el portavasos del auto.

Salió y miro su atuendo.

Nada mal, sin embargo, nada que una chica de su edad quisiera.

A ella no le importaba que ropa usara, con que tuviera ropa era más que suficiente.

Además, ella vive en su propio mundo en el que sólo se dedica a pensar en el chico pecoso de cabello azabache, esta muy ocupada como para mirar a las demás chicas y pensar "Wow, que lindo, yo lo quiero."

Camino y entró a su destino.

Miro a la caja y ahí estaba él.

Él en cuestión de segundos sintió su mirada y la miro de vuelta, sonriendo al segundo.

- Buenas tardes, ¿qué desea?.

Su voz la ponía nerviosa.

- U-un café.- él camino a la cafetera.

- De acuerdo.- el lleno el vaso son agua caliente.- ¿Vainilla?.

Ella solo asintió con la cabeza.

Ella sólo miraba como preparaba el café.

Ella sólo acomodaba su cabello.

A ella, sin darse cuenta, le comenzaba a preocupar su aspecto cada que asistía por su café donde se encontraba aquel chico.

- Tenga.- ella tomó la bolsa y le extendió los tres dólares.

Ella salio del local y subió al auto.

Miro al chico, ya se había dado cuenta que le había dado tres dólares y no dos.

Louis subió al auto y miro al chico.

- Volviste a olvidar tu dinero.- el iba a salir pero ella lo tomo del brazo.

- No vallas.

Louis se volvió a acomodar en su asiento, encendió el auto y lo puso en marcha, dejando a un Finn confundido.

Louis miro el café que se encontraba en el portavasos.

- A ti no te gusta el café, Poly.

- Bueno, te los compro a ti.

- Sólo los vas a comprar para ver a ese chico.

Se tenso y se quedó callada.

One Coffee.|| Finn WolfhardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora