Irreversiblemente

Capítulo 4

Me levante al otro día cansada porque ayer nos habíamos quedado hasta las 3 am jugando con los chicos al Pool. En ese tiempo, Manu y yo habíamos logrado conocernos mejor. Era un chico muy bueno . Él me había contado cosas de su vida, por ejemplo, que jugaba al rugby y también me había presentado un montón de chicos que nada más los conocía de vista. Martín se había ido después de "verdad o reto" y no volvió a aparecer. Lo cual me dejo pensando en que si enserio se había enojado.

No se si era lo correcto lo que estaba haciendo. Realmente me hacía parecer una persona mala. Pero tantas cosas habían pasado en mi vida que no quería que nadie más se interpusiera en mi camino.

  Ese día me lo tome para hacer toda la tarea que tenía para mañana y para limpiar mi habitación un poco. Iba a empezar la segunda semana de colegio y ya teníamos tarea y la fecha de varios exámenes. Cuando llegó mi mamá a casa nos pusimos a platicar sobre nuestra semana porque la verdad es que no habíamos tenido tiempo de hablar mucho esa semana. Le conté sobre la fiesta que había tenido y los nuevos compañeros que me había hecho Martina, Lucas y Manuel.

-¿Te sentis cómoda en esta escuela? No quiero que pase lo mismo que la anterior mi niña- me dijo mi mamá.

-Estoy bien ma. Te lo voy a hacer saber si pasa algo igual.- le respondí.

-Si hay algún chico molesto. Vos avísame y hablo con el director ¿me escuchaste?- insistió mi mamá.

-Lo qué pasó antes mamá no va a volver a pasar. No es posible.- le respondí y me fui a mi habitación.

Al cabo de una hora estaba hablando con Juliana. Le conté todos los detalles del día de ayer.

- A ese chico le vas a romper el ego.- me dijo Juliana.

-No se si esto está bien igual.- dudé- no se si quiero ser parte de este plan.

-Sabri, vos sabes lo mucho que te quiero pero no te podes dejar pasar por arriba. Vos sos la persona que más lo sabe. - me dijo. Y lo peor es que tenía razón.

Hablamos un rato más hasta que otra llamada interrumpió nuestra conversación. Me despedí de Juliana y atendí la llamada que venía de un número bloqueado.

-¿Hola?- respondí. Al principio ningún ruido se escuchó desde la otra línea pero cuando estaba por cortar una voz que parecía modificada por la computadora me dijo.

-Que bueno que la estes pasando bien. Pero, ¿cuánto te va a durar la felicidad Sabrina.-

Después de eso, la llamada se corto y mi respiración empezó a ser más rápida. En ese momento, entré en un estado de shock.

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Perdonen por lo corto que es este capítulo. Los próximos van a ser más largos lo prometo. ¿Les va gustando la historia? ¿Que creen qué pasó en el pasado de Sabrina?