Querido Dante,
No sé si enviaré
esta carta.
Pero quiero escribirla.
Y si la envío
y ahora lees esto,
no digas nada,
por favor,
porque me da miedo.
A veces recuerdo tus ojos,
lo profundos que eran ellos,
como tú.
Y tus cómics
de superhéroes
y galaxias lejanas.
Juntos,
llegamos a ellas.
Pero el viaje
de regreso
fue duro.
Y aún más
cuando te quedaste allí
y volví sola.
Porque Dante,
quería ser como tú
y no me di cuenta
de que ya lo era.
Lo siento tanto Dante,
fue culpa mía.
Hasta que todo acabe,
Siena.

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Siena
Короткий рассказºNo se olvidará de ninguno. Ni del joven que murió y yace ahora enterrado ni de la doncella que murió también y fue enterrada con élº Walt Withman