Capítulo 16

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La adrenalina fluyendo rápidamente a través de las venas, los pasos que a medida que se iba avanzando pesaban cada vez más, el corazón bombeando al máximo y el aliento que era más costoso recobrar debido a la incertidumbre, hacían extremadamente agotador el avanzar sin mirar atrás...

Abril y Mikey trataban con todas sus fuerzas correr en dirección opuesta a la del combate, le era muy difícil a ambos dejar a sus amigos a solas y a su suerte contra aquella chica de intenciones desconocidas.

— ¿Y a dónde se supone que debemos correr? ¡No quiero tener que huir para siempre!— Dijo el pequeño de banda anaranjada con los ojos llorosos

— Tenemos que ir a las afueras de la ciudad, no podemos permitir que Karai en su intento por seguirnos lastime a más gente

A pesar de todo el ajetreo Abril trataba lo más que podía mantener la compostura, pues tenía que tener la mente centrada para poder actuar de la manera más eficiente posible.

Mientras tanto el chico de cabellos negros intentaba con mucho esfuerzo mantener retenida a Karai, la joven lanzaba fuertes y certeros ataques, mientras que Casey sólo procuraba evadirlos y detenerlos con su ya muy desgastado palo de Hockey, la muchacha al mirar esta vulnerabilidad dirigió un golpe preciso al arma del chico, partiéndola completamente en dos

—¿Si te dijeron que tenías que escoger una mejor arma?—Dijo burlona Karai mientras pisaba los restos que quedaban de dicha

—A decir verdad es más original, eso de las espadas ya está muy visto— Dijo Casey en un tono fanfarrón

—Pues a veces lo "anticuado" suele ser más efectivo

La chica desenvainó su espada tratando de herir a Casey a una gran velocidad.

Pero antes de que pudiera si quiera rasguñarlo, Donnie se interpuso deteniendo el filo de la espada con ambas manos

—¡Don!—Casey se impactó al ver que las palmas del más alto comenzaron a sangrar

Karai se sorprendió un poco, no esperó un movimiento tan peligroso como ese, y menos de alguien como Donatello, quien usualmente no tomaba ese tipo de riesgos.

—Mira nada más, el chico listo se está volviendo más rudo, quien lo diría— Exclamó Karai más calmada pero sin quitar esa postura agresiva

—Bueno creo que ya era hora, no puedo permitir que dañes a los demás—Dijo Donnie con la voz algo débil ya que el golpe de Karai fue bastante doloroso

—Tarde o temprano iba a suceder esto, ustedes sólo se encargaron de adelantarlo viniendo justo hasta mí... pero ahora que lo pienso ¿Dónde está Leonardo? estoy segura de que él no hubiera permitido que esto pasara— Expresó Karai fingiendo lástima, y denotando una burlona sonrisa

—Maldita hija de la....

—Cálmate Jones, ambos sabemos que eso es cierto—Lo interrumpió Donnie

—Pero... Leonardo pensaba hacer todo lo contrario—respondió el chico susurrándole

—Sí pero ella no debe saberlo, querrá aprovecharse de eso para acercarse a él

—¿Qué tanto farfullan? ¿No ven que sólo me están haciendo perder el tiempo con sus niñerías?

—Vamos Karai ¿Desde cuando eres tan gruñona? recuerdo que te gustaba jugar un poco con nosotros— Respondió Casey tratando de conseguir más tiempo

—¿Jugar? yo jamás he tenido tiempo para eso

—Eso explica tus problemas—Exclamó en un tono bajo pero audible el chico de cabellera negra

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